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La contaminación, escasez de alimento, encharcamientos en las calles y la invasión con actividades y asentamientos humanos cerca de su hábitat natural, han propiciado que en los últimos años los cocodrilos moreletii huyan hacia la ciudad. El Instituto de Protección Civil del Estado de Tabasco (IPCET) ha capturado al menos 50 ejemplares en 27 calles de 25 localidades cercanas a los cuerpos lagunares del municipio de Centro.
Recorrer Villahermosa y de pronto encontrarse frente a 68 afilados dientes se ha vuelto más recurrente en los últimos años en las localidades cercanas a los cuerpos lagunares. De 2012 a la fecha, el IPCET ha recurrido a los llamados ciudadanos para someter a los saurios encontrados en la zona urbana alrededor de cuerpos lagunares como: Las Ilusiones, Vaso Cencali, Vaso Bonanza, Del Negro, El Jícaro, La Pólvora, Del Espejo, El Camarón, La Lima, entre otras.
Una solicitud de acceso a la información pública realizada por Novedades de Tabasco al IPCET marcadas con los folios 00789917y 00789517, señala que la Dirección de Bomberos adscrita a esa dependencia ha sometido a 50 saurios en diferentes calles de las localidades Linda Vista, Nueva Imagen, Heriberto Kehoe, José Narciso Rovirosa, La Manga, Magisterial, Residencial Framboyanes, Casa Blanca, El Recreo, Brisas del Carrizal, Bosques de Saloya, Miguel Hidalgo, Prados de Villahermosa, Gaviotas Sur, La Selva, La Municipal, Nueva Villahermosa, Ranchería Emiliano Zapata, entre otras.
AUMENTA EL ÉXODO
La Dirección General de Inspección y Vigilancia de Vida Silvestre, Recursos Marinos y Ecosistemas Costeros de la Procuraduría Federal de Protección al Medio Ambiente (Profepa) dio a conocer que de 2014 al 30 de junio de 2017 han recibido y reubicado a 76 cocodrilos moreletii, los cuales fueron capturados por otras autoridades.
El informe emitido por la dependencia federal bajo la solicitud de acceso a la información 1613100063217, da a conocer que en el primer semestre del año 2017 ha aumentado en 70% la recepción de saurios capturados fuera de su hábitat en comparación con el año 2014, cuando se recibieron un total de 10 cocodrilos en todo el año. El promedio anual ha sido de 10, en los primeros 6 meses de este año ya se contabilizan 17.
En un comunicado, la Profepa detalló que se han rescatado de las zonas urbanas desde crías hasta ejemplares adultos.
Algunos de los especímenes capturados fueron regresados a su hábitat natural, otros fueron llevados al Centro de Investigación para la Conservación de Especies Amenazadas, de la División Académica de Ciencias Biológicas de la Universidad Juárez Autónoma de Tabasco, para revisar su estado de salud y determinar su destino final.
La Profepa justifica que el reporte de avistamientos de cocodrilos en zonas urbanas se incrementa debido a los efectos meteorológicos que se conjugan con la geografía de la entidad, dado que se cuenta con diversos cuerpos lagunares y zonas pantanosas en lugares habitados.
LA COLONIZACIÓN DE SU HÁBITAT NATURAL
El biólogo Antonio Enrique del Ángel Flores señaló que es multifactorial lo que ha llevado a que los cocodrilos se internen en las zonas urbanas, siendo que para empezar se ha invadido con infraestructura urbana su hábitat natural, y en segunda por la reducción de su alimento en los cuerpos lagunares por la pesca furtiva.
Sostuvo que aunque no hay mucha información especializada, otro factor que puede llevar a que los saurios salgan a la ciudad puede ser la mala calidad del agua en las lagunas que habitan, causada por la contaminación. Este último factor no solo afecta la calidad del agua en la que viven, sino también a especies de peces, aves, pequeños mamíferos y anfibios que son su principal fuente de alimentación.
La especie Crocodylus Moreletii, a la que pertenece este ejemplar, se encuentra listada en la Norma Oficial Mexicana NOM-059-SEMARNAT-2010, bajo la categoría de especie Sujeta a Protección Especial (Pr), por lo que dañar, cazar, poseer o traficar a uno de estos animales silvestres se castiga con pena de uno a nueve años de prisión, más 240 mil pesos de multa y pena adicional de hasta tres años más de prisión, más 80 mil pesos adicionales de multa cuando se realicen en un área natural protegida o con fines comerciales.
El biólogo Antonio Enrique recomendó que en caso de encontrar a un espécimen de este en las calles, la recomendación es por ningún motivo intentar capturarlo, sino dar aviso a las autoridades. Hay que tomar en cuenta que estos reptiles no están invadiendo nuestras calles sino que nosotros ocupamos el espacio que a ellos les corresponde por antigüedad.
DEMANDARÁ SU ESPACIO
El Programa de Monitoreo del Cocodrilo de Pantano (Crocodylus moreletii) que realiza la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (CONABIO) calcula, con base en metodologías y algoritmos, que el tamaño poblacional estimado es de 73 mil 960 individuos silvestres con un incremento en su población en 7 de los 9 estados donde se realizaron monitorios, entre ellos Tabasco.
Este monitoreo refleja que la especie ha tenido una recuperación en su población, pero también deja ver que en su momento van a reclamar el espacio que les corresponde por antigüedad y que los seres humanos hemos invadido con infraestructura urbana.
El informe detalla que en la estimación del tamaño poblacional nacional, el 71% de los especímenes de cocodrilo moreletii son hembras, mientras que el 29% restante son machos.
A nivel nacional, las actividades humanas preponderantes en los sitios de monitoreo que ponen el riesgo a la especie en su mayoría corresponden a la pesca con un 41%, le sigue el turismo (29%), ganadería (11%), industria (9%), agricultura (7%) y asentamiento humano (3%).
CIFRA
76 cocodrilos han sido recibidos y reubicados por Profepa de 2014 al 30 de junio de 2017
COCODRILO MORELETII
Nombre Científico: Crocodylus Moreletii
Tamaño promedio: 3 metros
Alimentación: Pequeños mamíferos, peces, aves, insectos, e incluso otros reptiles.
Hábitat: Cuerpos de agua dulce cercanas al Golfo de México, y toda la región de América Central
Reproducción: La hembra es capaz de poner entre 20 a 45 huevos, luego de unos 80 días de incubación los huevos eclosionan; la temperatura determina el sexo del espécimen.
Estimado de población en México: 73 mil 960 individuos silvestres
71% hembras
29% machos
Actividades humanas que amenazan su hábitat
Pesca – 41%
Turismo – 29%
Ganadería -11%
Industria -9%
Agricultura -7%
Asentamiento humano – 3%
Fuente: IPCET; Profepa; Conabio; Expertos; NOM
