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A través de publicaciones y cadenas de mensajes en redes sociales, en donde con el argumento de que drones estaban dispersando sustancias tóxicas para acabar con la vida de los pobladores en lugar de desinfectar las áreas en medio de la pandemia de COVID-19, cientos de habitantes del municipio de Venustiano Carranza, en Chiapas, salieron a las calles para protestar contra las autoridades por supuestamente haber ordenado esta acción para matar a la gente, pues alegan que “el coronavirus no existe”.
Los rumores en redes sociales corrieron como la pólvora y un grupo de habitantes desató agresiones y disturbios e incendió y saqueó tiendas el pasado miércoles.
La cólera de los pobladores los llevó a hurtar artículos de una tienda Elektra y a quemar la casa del presidente municipal, Amando Trujillo Ancheyta.
A los lugareños se les hizo un llamado en las redes sociales para no creer en el COVID-19, pues ciudadanos afirmaban que era un “invento” del gobierno. Los disturbios detonaron debido a la publicación en una página de Facebook llamada Venustiano Carranza, Chiapas, en donde se incitó a la población a defenderse de esta supuesta agresión química.
La gente se congregó a 90 kilómetros de Tuxtla Gutiérrez, capital del estado y a raíz de estos mensajes, una multitud se manifestó y bloqueó calles. La protesta terminó con la quema de la sede del Ayuntamiento local.
Durante las protestas, lugareños acusaron al edil Amando Trujillo, de haber ordenado estos ataques y de haber traicionado al presidente Andrés Manuel López Obrador y al gobernador del estado, Rutilio Escandón Cadenas, para afectar a la gente pobre.
Hasta el momento, ni el alcalde ni la Fiscalía General del Estado (FGE) han emitido una postura al respecto para conocer sus acciones en torno a estos hechos violentos, así como para informar si hubo lesionados durante los disturbios.
Cabe recordar que, en abril, los pobladores de este mismo municipio se reunieron en la cabecera municipal para llevar a cabo el Viacrucis de Semana Santa sin respetar las disposiciones sanitarias de sana distancia para evitar la propagación del coronavirus.
