Para la familia Criollo Damián fue casi un alivio saber que su hijo Fernando Humberto no estaba secuestrado después de seis horas de no localizarlo; estaba en el Ministerio Público acusado de matar a un ex juez en un motel de Villahermosa, Tabasco, dijo su tío Raúl Criollo.
La Fiscalía estatal informó el 13 de abril en un comunicado que el 4 de marzo fue hallado en el motel Punta Laguna el cadáver del abogado Ariel de Jesús Gutiérrez Díaz.
El abogado «tenía 14 puñaladas hechas con dos armas punzocortantes», dijo en entrevista para un diario nacional, Raúl Criollo, quien sigue el caso de su sobrino desde la Ciudad de México.
Más de un mes después del asesinato, el 11 de abril, policías de investigación de la Fiscalía detuvieron en Villahermosa a Fernando Humberto Criollo Damián cuando iba a bordo de una camioneta con dos amigas del Instituto de Estudios Universitarios, donde estudia gastronomía.
«Existen varias irregularidades en este caso, la detención se realizó de manera violenta no respetando sus derechos individuales, siendo ésta a las 13 horas, pero fue hasta las 19 horas que reportaron su aparición en la Fiscalía», se lee en un comunicado entregado por el tío del joven a a conocido medio.
Este medio solicitó una entrevista con el fiscal Fernando Valenzuela para detallar aspectos de la investigación; sin embargo, no se tuvo respuesta.
Entrevistado en una cafetería en el centro de la Ciudad de México, Raúl Criollo dijo que las supuestas pruebas de la fiscalía contra su sobrino son un retrato hablado hecho con las indicaciones de Andrés Peres Ordoñes, empleado del motel «que tuvo a la vista a los dos sujetos que victimaron al Ariel de Jesús Gutiérrez Díaz».
Según el comunicado entregado por Raúl Criollo, el testigo vio a los presuntos asesinos «a una distancia aproximada de tres metros ya que estaba oscuro y por un periodo de dos o tres segundos el tiempo que duró en abrir la cortina, en el que solamente pudo identificar a uno de ellos como una persona del sexo masculino, delgado, corto de cabello tipo militar raso, moreno claro, como de veinticinco años de edad».
Sin embargo, Raúl Criollo afirma que su sobrino no coincide con las características aportadas por el empleado del motel, ya que su familiar tiene cabello largo, de complexión regular, joven y mide 1.89 metros. Además, dijo que la noche del 3 de marzo su sobrino estaba de compras en un Soriana porque al día siguiente viajaría. Ya pidieron videos, pero dijeron que los borran cada 15 días.
En una ampliación de declaración, al testigo se le mostró una fotografía de Fernando Humberto y dijo «no reconocer plenamente» al joven como uno de los asesinos del ex juez. Lo mismo ocurrió cuando hubo un careo entre Fernando y el testigo:
«La verdad es que él no es la persona que describí inicialmente, pues aquel era un poco más bajo, más de edad, pues la verdad no es» y agregó que «él no es la persona que vi en el motel», dijo el testigo.
Una de las pruebas de la fiscalía contra Fernando son unas fotografías obtenidas del Facebook del abogado, por medio de la contraseña que dio una testigo; sin embargo, la defensa del joven afirma que nunca han sido mostradas.
Raúl explicó que en la declaración ante el MP, la mamá del abogado dijo que su hijo salía con un hombre llamado Fernando y, aseguró, que por eso las autoridades relacionaron a su sobrino con el ex juez.
El comunicado entregado por Raúl Criollo indica que el Ministerio Público aportó 36 elementos de prueba y solo logró comprobar la existencia de una persona asesinada y «nunca probó ni acreditó» que el joven lo haya matado.
Sin embargo, el 13 de abril la fiscalía consignó a Fernando ante un juez, el cual inició un proceso penal en su contra por el delito de homicidio. El abogado del joven ya interpuso un recurso de apelación.