Ricky Martin, embajador de buena voluntad de UNICEF, considera que la palabra «refugiado» ha perdido valor y que la comunidad internacional debe «abrir su corazón». El superastro puertorriqueño de 44 años habló durante una visita a Líbano con UNICEF para reunirse con niños sirios refugiados.
«A estas alturas lo que queremos es asegurarnos de que los niños reciban sus derechos. Algunos niños desafortunadamente no están yendo a la escuela», dijo el jueves en una entrevista en Minnieh, en el norte de Líbano.
El cantante se reunió con niños sirios en Zahleh, en el Valle de Bekaa, el miércoles, y en el asentamiento informal de Minnieh, cerca de la ciudad norteña de Trípoli, al día siguiente.
En Minnieh, los niños cantaron su éxito ‘María’ y jugaron futbol con el astro. Durante su visita, Martin también se reunió con adolescentes que reciben entrenamiento de conocimientos prácticos, según UNICEF.
Martin, cuya fundación benéfica y trabajo humanitario se ha enfocado en combatir el trabajo infantil y la trata humana, expresó que quedó conmovido con una niña siria de Homs a la que conoció en el Valle de Bekaa.
Dijo que la joven refugiada de 11 años, llamada Batoul, está «trabajando en agricultura, 12 horas al día, y le pagan con agua».
«Esto le está sucediendo a nuestros niños. Esto le está sucediendo a nuestra futura generación», señaló.
De acuerdo con UNICEF, 2.8 millones de niños no acuden a la escuela en la región y los niños refugiados están particularmente en riesgo de explotación y abuso. La agencia de las Naciones Unidas dice que está abordando el problema del trabajo infantil proporcionándoles educación gratuita y oportunidades económicas a padres y jóvenes en edad laboral.