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El Plan DN-III-E de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) llega a su quincuagésimo aniversario con el objetivo de atender a la población que resulte afectada por un fenómeno que origine un desastre, dijo el comandante del Cuarto Regimiento de Reconocimiento del Campo Militar, Óscar González Zamora.
En el marco de la inauguración de la exposición fotográfica por el aniversario del Plan DN-III-E, recordó que en 1966 inició formalmente este mecanismo de ayuda y apoyo a la población afectada, luego del desbordamiento de los ríos Pánuco y Tamesí a causa del huracán Inés, en el mes de septiembre.
Sin embargo, los antecedentes del Plan DN-III-E se remontan al año de 1926, cuando en el estado de Guanajuato se registró una fuerte inundación por lluvias.
«En ese entonces el director general de Salubridad, Alfonso Priani, manifestó que se trataba de una verdadera desgracia la que solamente el Ejército mexicano podría imponerse», recordó el comandante González Zamora.
Posteriormente, entre 1944 y 1955, personal del Ejército mexicano apoyó a la población afectada por las intensas lluvias en comunidades de Chihuahua y Tamaulipas.
Incluso, se construyó un puente aéreo entre las ciudades de México y Tampico para transportar en total a mil 833 pasajeros y 172 mil kilogramos de víveres, medicinas y ropa.
En septiembre de 1955 también se registró el paso del ciclón Janet por Quintana Roo y continuó por la Península de Yucatán para internarse en el Golfo de México y tocar tierra en Barra de Nautla, Veracruz, donde la fuerza aérea volvió a tender puentes aéreos para la ayuda a la población.
Esa fue la primera vez, recordó el mando militar, que México recibió ayuda del extranjero, específicamente de Estados Unidos, con el portaaviones «Uss Spain», al mando del contralmirante Milton Edward Miles.
Sin embargo, fue en marzo de 1966 cuando el entonces secretario de la Defensa Nacional, Marcelino García Barragán, presentó al Poder Ejecutivo federal la primera versión del Plan DN-III-E para su posterior ejecución en el país en situaciones de desastre.
«En 50 años, el personal de la Secretaría de la Defensa Nacional y el Ejército mexicano continúa con su labor de ayudar a la población afectada por eventos que originen un desastre, objetivo que no ha perdido la brújula en ningún momento», hizo hincapié.
Recordó que el territorio mexicano está sujeto a las afectaciones de fenómenos perturbadores como huracanes, fuertes lluvias, sismos, volcanes, incendios forestales y accidentes de diversos tipos y derrames de sustancias peligrosas, donde el Plan DN-III-E actúa de forma oportuna y decidida.
«Nunca será motivo de alegría la aplicación del Plan, pero la unión entre el pueblo y sus fuerzas armadas para vencer cualquier tipo de adversidad siempre será motivo de orgullo», puntualizó.
En la sede de la Legislatura local permanecerá a partir de hoy y hasta el 23 de junio una exposición fotográfica de la labor de los elementos del Plan DN-III-E, en apoyo a la población afectada en el país.
