Los Cleveland Cavaliers hicieron lo que parecía imposible. Se convirtieron en el primer equipo campeón de la NBA que remonta una desventaja 1-3 en las Finales, al vencer 93-89 a los Golden State Warriors.
Los Cavaliers dieron el primer título en alguno de los cuatro deportes principales a la ciudad de Cleveland en 52 años.
Y LeBron James cumplió su misión y palabra, cuando decidió regresar a la región que lo vio nacer física y profesionalmente.
James distó de tener su mejor partido en puntos de las Finales NBA, pero su presencia, su defensa y su ímpetu fueron suficientes.
Terminó con triple-doble que incluyó 26 puntos, 11 rebotes e igual número de asistencias.
Fue una serie final que será recordada por generaciones. Más pareja, imposible, luego de que ambos equipos llegaron con 610 puntos idénticos y con 1:19 por disputarse estaban empatados a 89 por lado.