El joven mexiquense Víctor Reynoso Martínez, de 15 años de edad y estudiante de segundo de preparatoria, recibió la medalla de oro del Canada Wide Science Festival 2016, en la categoría de innovación, tras presentar su invento llamado Pastillas Fertiorín: un fertilizante sólido de lenta liberación, fabricado a partir de orina humana. El joven inició ya la solicitud de patente en México para este desarrollo.
La orina humana es uno de los recursos más contaminantes a nivel mundial, pero también tiene alto contenido de nitrógeno, fósforo y potasio, que son esenciales para la fabricación de fertilizantes o nutrientes vegetales, por lo que Reynoso Martínez desarrolló una idea para extraer esos elementos y usarlos como base de pastillas de bajo costo aplicables a los suelos y que liberan nutrientes durante más de cuatro meses.
“Mis objetivos eran tres: el primero y más importante era elaborar este fertilizante de lenta liberación; el segundo era realizar un comparativo entre mi fertilizante contra fertilizantes comerciales, y el tercero era calcular por medios matemáticos la composición exacta de nitrógeno, potasio, fósforo y elementos químicos menores que tienen estas pastillas”, detalló Víctor, quien afirma tener la vida común de un adolescente. “Tengo mis amigos, me gusta ir a las plazas, tengo mi teléfono”.
Residente en Tultitlán, Estado de México, comenzó a presentar proyectos de ciencia a concursos escolares desde niño. Cuenta que ha participado en 19 concursos de ciencia y aunque ha perdido muchos, ya ha representado a México en ferias y competencias de ciencia en Argentina, Canadá, Paraguay y Perú. Ha obtenido dos terceros lugares, un segundo lugar y ahora un primer lugar.
“Es muy feo cuando pierdes. Yo llegué a llorar y a no querer volver a competir. Pero lo más sorprendente es que cuando ganas tampoco es tan bonito: nadie te espera en el aeropuerto, tus compañeros de clase te aplican la ley del hielo y hasta los maestros te hacen bullying. Eso hizo que una vez me tuviera que cambiar de escuela, pero ahora estoy en otra, que se llama Jean Piaget y ellos me apoyan en todo”, compartió este talentoso joven.
Contó que a algunas competencias sólo llegó con apoyo económico de su familia y en los más recientes ya ha recibido apoyo económico del gobierno municipal de Tultitlán y del Estado de México.
“El punto de partida del desarrollo del fertilizante fue preguntarme: ¿Si la orina contiene nitrógeno, fósforo y potasio y elementos menores que también se utilizan para la elaboración de fertilizantes, sería posible hacer un proceso que extraiga esos componentes y los reúna en una pastilla para hacer un nutriente vegetal? Y así nació este proyecto”, explicó a Crónica el joven mexiquense.
ANÁLISIS Y SÍNTESIS. Para llegar a obtener su pastilla y después comparar su eficiencia contra otros fertilizantes, Víctor hizo varias reacciones. Primero requirió una reacción para generar una pasta que contenía Nitrógeno y elementos menores como Boro, Zinc, Manganeso, Hierro, Cobre, Cloro. Después realizó una segunda reacción con la que añadió Fósforo y Potasio.
El fertilizante fue probado con plantas de haba, frijol y jitomate se observó un crecimiento más robusto de raíz, hojas y tallos. Estos resultados hicieron que Víctor y su familia identificaran la viabilidad comercial del desarrollo y busquen registrar este invento.
“La verdad, esta idea nació cuando vi frente a mi casa, en Tultitlán, una parcela de papa y me di cuenta que la riegan con aguas residuales. Entonces me dio asco pensar que me estaba comiendo esas papas regadas con agua que estuvo con contacto con desechos humanos. Fui a revisarme al doctor y ya no quería comer, pero después empecé a investigar y vi que la orina ya se usaba como fertilizante, pero lo que no se había pensado es usarla de manera sólida, en pastillas. Eso fue lo que yo hice y al presentarlo me valió el pase para ir a Canadá y ahí ganamos la medalla de oro”, contó a Crónica.