El señor de los cielos, La reina del sur, la próxima a estrenar El Chema, Rosario Tijeras o El Capo son teleseries con un tema en particular: el relato, a partir de la ficción, de la cotidianidad de personas como Amado Carrillo, Teresa Mendoza, José María Venegas o los roles creados en el texto Rosario y Pedro Pablo León Jaramillo. Mujeres y hombres inmersos en la criminalidad.
De acuerdo a los Estudios sobre oferta y consumo de programación para público infantil en radio, televisión radio difundida y restringida, publicados por el Instituto Federal de Telecomunicaciones, de lunes a viernes, entre 13:00 y 17:00 horas, comienza la curva de crecimiento de exposición a la televisión, y alcanza entre las 20:00 y 22:00 horas el horario con mayor nivel de encendidos por parte del público infantil.
En el considerado prime time de la televisión radiodifundida (señal abierta), entre las 20:00 y las 24:00 horas, Televisa, TV Azteca e Imagen Televisión apostaron por transmitir las nombradas Narcoseries.
La alta presencia de público infantil en esa franja de tiempo generó el llamado de los presidentes de las comisiones de Radio y Televisión del Senado de la República y de la Cámara de Diputados, senador Zoé Robledo Aburto y diputada Lía Limón García a “no prohibir” el género en TV abierta, sino “que salgan a la hora que deben, es decir, a partir de las 00:00 a las 05:00 horas”, dice Robledo.
Actores, encargados de dar vida a estos personajes, coinciden en la urgencia de diversificar la oferta en contenidos hoy acaparada por las Narcoseries. Consideran al formato una moda, con elementos incluso de fantasía, sin embargo, al tiempo comparten con Crónica su compromiso por no hacer una apología del crimen organizado.
“Sí es una fantasía, obviamente ninguno de los narcotraficantes es así (físicamente), ninguno se liga a esas chavas. Todo está exagerado para un divertimento. Lo que sí se hace es analizar un poco cómo sucede el negocio, cómo está todo coludido con las autoridades. Eso es interesante para que la gente lo entienda.
“Nunca fue la intención que quisieran imitar o que (los capos) se volvieran héroes. No hay manera que se pueda pensar que Aurelio Casillas, que es un hijo de la fregada, malo con las mujeres, amigos, su mamá o el país, es un personaje heroico. Nosotros lo mostramos como es, algo muy negativo”, dice Plutarco Haza, quien forma parte del elenco de El Capo y El Señor de los Cielos.
Sin embargo, Haza acepta que, en el caso de El Señor de los Cielos, la imagen de los protagonistas puede dar pie a cierta aspiración: “Sí hay algo de apología, porque al final de cuentas, lo que mostró El Señor de los Cielos es que físicamente el casting fue más tipo telenovela, hizo este punto medio para que a la gente le guste mucho”.
Éxitos recientes de otro tipo de historias permitirán, considera el intérprete, lo más importante: diversidad de temas. “Esto es un negocio, si hay demanda, habrá oferta. A mí como actor me gusta que haya variedad. Ahora las series de la vida de Juan Gabriel o Joan Sebastian dan oxígeno, como tuvieron éxito se harán más, para luego regresar a la comedia y más géneros”, agrega.
El principal argumento de llevar a la pantalla chica la vida de estos criminales es, de acuerdo a quienes lo hacen, mostrar un relato más de la realidad cotidiana. Eduardo Arroyuelo confía en que sea así como se ven estas tramas. Apela a un mayor desarrollo en las audiencias para aceptar este tipo de contenidos como una ofertay no como un ensalzar a maleantes.
“La narrativa siempre estará en función de la realidad. No glorificamos nada, no comulgo en lo más mínimo con la ética moral de ninguna persona que genere dolor y sufrimiento a otro ser. Sin embargo, es la realidad, queremos cambiar estas series, hay que cambiar nuestra realidad primero y nuestros contenidos tratarán de otra cosa.
“Durante 25 años se consumieron películas de la mafia italiana-americana: El Padrino, Scarface o Los Soprano, eso no quiere decir que el medio esté inundado de eso. Lo que pasa es que el arrancón de la telenovela rosa derivó en la Narconovela. Hay que profundizar en entender por qué se cuentan estas historias: es una realidad y hay conflictos para el drama”, comparte el actor de El Capo.
Francisco de la O, quien participa en El Chema, que se estrenará tentativamente el 22 de noviembre por Telemundo, apela a la cercanía en las familias, hablar directo para evitar que sea una pantalla la encargada de influir en la conducta de la población, particularmente la infantil y juvenil.
“Vivimos un mundo en el cual se trabaja poco la mente, donde podemos pensar que el sexo, la droga o el dinero son cosas que nos pueden sacar y ponernos en el lugar donde queremos. Hoy en día hay que dar herramientas para ser responsables y comprometidos con las cosas.
“La realidad es tan dura que tal vez es bueno decirle a la gente: ‘hagas lo que hagas, si eres narco o te vas por el lado de la inmoralidad, te la vas a pasar de la chingada’. Los narcos no viven bien, no se la pasan bien, no son felices, no disfrutan nada, eso es lo que queremos dar a entender. Que vean lo que les puede pasar”, finaliza De la O.