Varios estudios los señalaban como la especie en que la fidelidad era su principal referente… «La pareja puede estar separada por cientos o miles de kilómetros en el mar, pero mantienen su relación», afirmó Jean-Baptiste Thiebot, especialista en biología marina, sobre una pareja de pingüinos de cresta amarilla; pero un video de National Geographic ‘tumbó’ la hipostesis.
El material compartido el pasado 4 de noviembre en Twitter con el título «Animal Fight Night: Homewrecking Penguin» hizo referencia al regresó de un pingüino tras un año de ausencia… nada grató le fue encontrar a su pareja junto a un intruso.
La infidelidad también se da en la especie que muchos pensaban era inmune a la traición. El macho llegó al nido y se encontró al usurpador junto a la que creía su pareja fiel. El reto era más que inminente, aunque en primera instancia pareció rehuir al enfrentamiento la ventajosa ave que logró seducir a una hembra con pareja.
De acuerdo con Delaney Chambers, “el 76 por ciento de los pingüinos se aparea con la misma pareja durante toda su vida”, el cambio se llega a dar cuando el macho muere.
Luego de algunos picotazos, la pelea se vuelve sangrienta… Y será, como lo muestra el material, la hembra quien decida. Se inclinó por el amante, por lo que el macho debe de abandonar el nido y buscar otro refugio. Cinco minutos de picotazos y aletazos -pueden golpear hasta ocho veces en un segundo- son muestra de esa lucha en que el macho fendido buscó hacer pagar al intruso, pero de nada sirvió.