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El pecado de Guillermo Padrés Dagnino es ser hijo del ex gobernador de Sonora, Guillermo Padrés Elías, dijo su mamá Iveth Dagnino, luego de que ayer un juez le dictó auto de formal prisión por los delitos de delincuencia organizada y lavado de dinero.
«Me siento muy dolida, sorprendida con el sistema de justicia mexicano; sin embargo, puedo decir que toda mi fe está puesta en el despacho de abogados del cual mi hijo también pertenece (…) Su pecado es ser hijo del ex gobernador», dijo en entrevista con Ciro Gómez Leyva para Grupo Fórmula.
El joven de 26 años, quien es parte del equipo de abogados del ex mandatario, fue detenido el 10 de noviembre cuando su padre se entregó a un juez para enfrentar los cargos por los que se le acusa.
El juzgador determinó que hay elementos para presumir que Padrés Dagnino utilizó una de sus cuentas bancarias para recibir parte de los 178 millones que presuntamente derivaron de 260 millones de pesos producto de licitaciones a modo para uniformes y útiles escolares durante la gestión de su papá en Sonora.
Afirmó que interpondrán un amparo para su hijo, a quien se lo quitaron para ‘doblar’ al ex gobernador.
«(Guillermo Padrés Elías es) un hombre de bien, que va y le dice a México ‘aquí estoy’ y ¿qué le hacen? Le quitan a su hijo, lo quieren ‘doblar’, lo quieren ver como lo están viendo. No es justo. Nos quitan a nuestro hijo», dijo.
Detalló que fue cancelada desde marzo la cuenta bancaria de ella, en la que recibía dinero de una empresa de su padre. «Mis hijos, igual su papá, les depositaba a una cuenta Libretón. Las cuales fueron congeladas», dijo.
Sobre si llega a ser detenida, dijo que ahorita puede esperar de todo, «tengo miedo de mis otros cuatro hijos. Ahorita tres son mayores de edad, el chiquito apenas tiene 7 años, pero por supuesto que me da miedo. ‘Memito’, mi hijo, nunca tuvo que ver en el gobierno de Sonora. Él se encontraba estudiando en la Libre de Derecho», indicó.
Pidió a las autoridades tomar las cosas «un poquito más frías, que dejen la cosa política a un lado y que sean justos».
