Culturarte: Siempre leales, seamos todos hermanos

Por: Lic. María Elodia Zurita Argáez

¡Hoy también es un gran día! Hace 104 años, fue creado el 19 de febrero de 1913, el Ejército Nacional Mexicano, motivo de orgullo de cada uno de nosotros. Los militares son guardianes de la soberanía nacional, deben y están dispuestos a dar la vida sí la nación así se los demandara, ¡menuda misión! Por si esto fuera poco, tienen y deben ser ejemplo de los más altos valores que deben regir la vida de persona alguna, destacándose el honor, y su lema es: “Siempre leales”

En la época prehispánica, la civilización mexica desplegó un gran poderío guerrero, su ejército alcanzó organización y disciplina muy desarrollada para su época; la preparación militar era obligatoria para los jóvenes. La actividad bélica era el único camino para el ascenso social.

Durante el virreinato, los españoles establecieron un sistema militar que consistía en milicias, mismas que estaban conformadas por castas; no tenían una instrucción en armas ni en tácticas de guerra. Una forma en la que se enlistaban los hombres era por sorteos y las personas inscritas en los padrones debían estar sanas física y psicológicamente.

A lo largo de nuestra historia y dependiendo de los eventos sociales que atravesaba el país, se conformaron distintos ejércitos que enarbolaban diferentes causas: el Ejército Realista en Nueva España, Ejército Insurgente, Ejército Trigarante (este es el primer ejército del México independiente y resultó de la fusión de las fuerzas armadas realistas y los grupos guerrilleros insurgentes), Ejército Imperial Mexicano, Ejército Nacional, Ejército Liberal, Ejército Federal, Ejércitos revolucionarios, Ejército Constitucionalista, El Cuerpo de Ejército del Noroeste, El Ejército Libertador del Sur, El Ejército Convencionista, hasta que llegamos al actual.

El Ejército Nacional Mexicano tiene implementados tres planes de estrategia denominados: Plan DN-I, PLAN DN-II y PLAN DN-III. El primer plan está diseñado para enfrentar un país o fuerza extranjera enemiga que invadiera nuestro país, siendo una remota posibilidad por ser México un país entregado a la paz, conforme a la Doctrina Estrada de no intervención en asuntos de otros países y al principio de Benito Juárez cuando expresó: «Entre los individuos como entre las naciones, el respeto al derecho ajeno, es la paz»; el segundo plan combate a las fuerzas internas que socaven la estabilidad de las instituciones como en el momento actual cuando sostiene un combate frontal al narcotráfico, lo que ha aumentado drásticamente la presencia militar visible en varios estados del país al realizar labores policiales de forma rutinaria; y por último, el plan atiende a la población civil en casos de desastres naturales como los huracanes y terremotos.

Para proteger a los militares heridos en campaña se creó La Cruz Roja. Henry Dunant durante la Batalla de Solferino, observó cómo yacían 40.000 hombres prácticamente abandonados a su suerte y vio cómo morían los heridos sin asistencia. Ayudado por gente de los pueblos cercanos, se dedicó a socorrerlos: convenció a la población local para que atendiese a los heridos, sin fijarse en qué bando del conflicto estaban, usando el lema «Tutti fratelli” (todos hermanos). Este evento dio lugar al nacimiento a la célebre, humanitaria, neutral y sin fines de lucro, organización mundial de la Cruz Roja.

El general Porfirio Díaz Mori expidió el decreto con fecha 21 de febrero de 1910, por el cual se reconoce oficialmente la creación de la Cruz Roja Mexicana. Luz González Cosío de López es considerada la fundadora de esta organización en nuestro país. Los días 27 y 28 de agosto de 1909, el norte de México se vio afectado por una serie de lluvias torrenciales, que ocasionaron graves desastres en la ciudad de Monterrey, Nuevo León, y afectaron a más del 50 por ciento de la población, motivo por el cual la ayuda partió de la Ciudad de México; al frente de la brigada y como responsable de los socorros, se designó al doctor Fernando López y a su esposa, Luz González Cosío de López, quienes acompañados por un grupo de amigas, partieron con rumbo a la devastada ciudad de Monterrey, a donde llegaron con víveres y ayuda humanitaria.

¡Que esta sea una productiva semana para todos! La ciencia nutre la mente, la religión alimenta el espíritu, el arte enriquece el alma. Facebook: Mary Zurita. Correo: maryzurita2006@yahoo.com.mx

Acerca de Jorge Cupido

Te puede interesar

Hallan fósiles de tortuga gigante en los Andes colombianos

Paleontólogos han descubierto fósiles de una especie gigante de tortuga en los Andes de Colombia, …