Edgardo Codesal, quien hasta principios de enero se desempeñaba como director del área técnica de la Comisión de Arbitraje, de donde los propios silbantes lo obligaron a renunciar por no comulgar con su plan de trabajo, considera que con el aumento de las sanciones a Enrique Triverio y Pablo Aguilar no sólo ganaron los árbitros, sino que sometieron a su voluntad a la Federación Mexicana de Futbol.
“En el procedimiento, alguien con habilidad política y conocimiento buscó una salida elegante para el problema; evidentemente ganaron los árbitros, la Federación tuvo que doblar las manos en algo que al principio parecía una demostración hacía los árbitros de que ellos podían hacer lo que quisieran. La Federación sabía desde la semana pasada que los árbitros estaban inconformes con la supuesta sanción que iban a imponer y no la máxima, como indica el reglamento”.
Sin embargo, el ex árbitro internacional lamenta que “todo se debió de haber evitado y esto nos tiene que llevar a todos a la reflexión, por lo menos a los que están hoy en la Federación, a que deben apegarse a los reglamentos y no hacerse interpretaciones dependiendo las circunstancias. Hay una ley y debe de respetarse, si se hubieran apegado a eso, nada de esto hubiera sucedido”.
De si crecerá ahora la exigencia para los silbantes, Codesal valoró que “ahorita los árbitros tendrán que responder bien en la cancha, con mayor cuidado, porque todo el medio futbolístico estará pendiente de la toma de decisiones”.
¿La AMA salió fortalecida?
“La AMA ha salido más fortalecida. También hay que acercarse más al árbitro, porque yo veo que muchos directivos no saben ni siquiera cómo se está trabajando en el del arbitraje. No se ve que haya una preocupación cercana de ver qué árbitros están preparando. La producción, que vendría siendo el día del partido, está en manos de una persona que toma decisiones por 90 minutos y que (los dueños) no saben ni cómo está preparada”.
Para Codesal, el jugador americanista sí amerita sanción de un año, “lo que hizo Aguilar es una agresión clara y evidente, de acuerdo a lo que vimos en el video y lo que hizo; sí hay un intento de provocar un daño con un cabezazo”. Con el del Toluca, dice, el criterio es diferente, “lo de Triverio es una falta que el propio reglamento indica que es menor; es un empujón sobre el pecho, sin haberlo derribado, no hay una intención clara del daño, sólo un enojo y deseo de pretender que el árbitro lo atienda para dialogar con él. Me parece que Toluca sí tendrá oportunidad de hacer una apelación”.
Sobre las palabras del presidente de la Femexfut, quien descartó revanchas contra los silbantes que boicotearon la Jornada 10, Codesal dice que espera “no haya revanchas por parte de la Federación, sería absurdo; claro que si le preguntan a ellos, tampoco van a decir ‘sí va haber’. Habrá que esperar las circunstancias más adelante, pero no creo que todavía, con todo lo que han aprendido de esta experiencia, haya la idea de alguna revancha. No me pasa por la cabeza, sería meterse en más problemas”.