Silvia Navarro llegó con su novio Gerardo Casanova al Abierto Mexicano de Tenis en Acapulco, e iba taaan ligerita, que enseñó una bubi.
La pareja asistió al estadio acompañada de Roberto Gómez Fernández y su esposa Krystell Padilla, quienes se casaron en enero.
El escote de la actriz era tan atrevido, que hasta el hijo de Chespirito no pudo evitar echarle discretamente un ojito.
Con cada movimiento, la tela se movía, hasta que la abertura la traicionó ¡y enseñó de más!