Más de 230 internos participaron este Viernes Santo en la representación de la Pasión de Cristo en ocho centros penitenciarios regionales de Tabasco.
Caracterizados unos como el nazareno y otros como soldados romanos, María, Judas, la Magdalena y Pilatos, las personas privadas de la libertad llevaron a cabo el Viacrucis como parte de su fe y en el marco de los programas de reinserción social.
Dicha actividad se realizó en el Centro de Reinserción Social del Estado de Tabasco (CRESET) con la participación de 54 internos, de los cuales 44 fueron hombres y diez mujeres.
Asimismo, en la cárcel regional de Cárdenas fueron 18 las personas en reclusión quienes participaron en el Viacrucis, mientras que en Comalcalco lo hicieron 40 internos, 30 en Cunduacán, 30 en Tenosique, 35 en Huimanguillo, 20 en Tacotalpa y siete en Centla.
En los diversos centros penitenciarios regionales los internos efectuaron la representación de la crucifixión con las siete palabras, aunque en algunos casos también rememoraron un día antes la última cena, la oración del huerto y el lavatorio de pies.
La vestimenta fue confeccionada por los propios internos, con apoyo de personas voluntarias de la iglesia católica, familiares y con la ayuda de las áreas de los centros penitenciarios encargadas de coordinar las actividades religiosas.
Al respecto, el director general de Prevención y Reinserción Social del Estado, Arturo Maldonado Pulgar, explicó que la instrucción del Secretario de Seguridad Pública, Jorge Alberto Aguirre Carbajal, ha sido impulsar todas aquellas actividades que ayuden a los internos a revalorarse como personas porque ello sin duda contribuye a su plena reintegración a la sociedad.
«Por eso nosotros respetamos la fe de los internos y promovemos todo aquello que fortalezca su espiritualidad y estado de ánimo, por eso les permitimos llevar a cabo actividades como los nacimientos en diciembre o los Viacrucis en Semana Santa, pues son actividades que les dan esperanza, porque sin esperanza no hay reinserción posible».