Los productores de aguacate en el estado mexicano de Jalisco patrocinaron el domingo la elaboración de un guacamole de tres toneladas que obtuvo un récord Guinness para destacar que es una región en crecimiento, y que contribuye a satisfacer la creciente demanda mundial del llamado «oro verde».
Este acontecimiento fue parte entretenimiento y parte un mensaje político.
Los productores mexicanos afirman que ellos -y los estadunidenses amantes del guacamole- se han beneficiado del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), que ahora está amenazado por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
Más de 600 estudiantes de gastronomía y 400 habitantes de la ciudad rural de Concepción de Buenos Aires prepararon el tradicional platillo con alrededor de 25 mil aguacates para alimentar a miles de personas.
El gobernador del estado asistió para recibir el título del récord Guinness.
Alrededor del 80 por ciento del consumo de aguacate de Estados Unidos proviene de huertos mexicanos, que se extienden cada vez más. Jalisco se ha convertido en el segundo mayor productor de la variedad Hass en México detrás del estado de Michoacán, según productores.
Negociadores de Canadá, México y Estados Unidos se reúnen en estos días en la capital mexicana para discutir la modernización del TLCAN, que Trump ha amenazado con terminar si no logra frenar el déficit comercial con México.
Negociadores estadunidenses han dicho que quieren incluir disposiciones para facilitar a productores la posibilidad de presentar casos antidumping contra México.
Esta idea ha sido criticada por restaurantes y minoristas estadunidenses, que dicen que subirían los precios.
Los productores mexicanos afirman que sus contrapartes estadounidenses no pueden satisfacer la demanda de consumidores de aguacate en su país.
«La importación de aguacates de México no ha causado la pérdida de ni un solo puesto de trabajo en la industria doméstica ni la quiebra de ni un solo productor», dijo Ramón Paz, portavoz de los productores de aguacate de Michoacán.