Su vida era un infierno y optó por colgarse de la hamaca. Laura Gómez Reyes, oriunda de la colonia 17 de Julio del municipio de Nacajuca, dejó en la orfandad a cuatro niños y, según sus familiares, tenía una relación complicada con su pareja.
Historias como la de Laura son un reflejo de situaciones que se repiten casi a diario en Tabasco -aunque no siempre con el mismo desenlace-, consecuencia del machismo que en pleno siglo XXI continúa imperando.
Para muestra un botón: las mujeres de Tabasco son quienes a nivel nacional enfrentan mayores episodios de violencia física en sus relaciones de pareja; además, ocupan el cuarto lugar en cuanto a violencia económica ejercida por su actual o anterior pareja. También ocupan el sexto lugar en violencia emocional, la cual una vez más es ocasionada por sus parejas, todo esto de acuerdo con los resultados de la Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares (ENDIREH).
Según los indicadores que consigna el diagnóstico y evaluación de la situación de violencia de género en comunidades rurales e indígenas de Oaxaca, Chiapas y Tabasco, que citan a la ENDIREH 2016: “el 66.1 por ciento de las mujeres de Tabasco de 15 años y más, ha sufrido algún tipo de violencia en la familia, la pareja, la comunidad, la escuela, el trabajo o patrimonial”.
El reporte destacó que el 30.2 por ciento de las mujeres de la entidad ha vivido situaciones de discriminación, hostigamiento, acoso y abuso sexual en su lugar de trabajo; además, revela que a lo largo de su última relación, 48.4 por ciento de las mujeres enfrentaron algún tipo de violencia de parte de su pareja o ex pareja, siendo la más frecuente la violencia emocional con 41.4 por ciento, seguida de la violencia económica con 27 por ciento, la violencia física con 25.7 por ciento y la violencia sexual con 8.4 por ciento.
En tanto, en el caso de las 221 mil 213 mujeres casadas o unidas que han sido violentadas a lo largo de su relación, el 25.9 por ciento ha padecido violencia extrema por parte de su pareja, esto significa que una de cada cuatro mujeres que ha sido agredida en su relación, ha requerido de apoyo médico o intervenciones quirúrgicas para superar los daños infligidos, pero lo grave -según el estudio- es que sólo el 26.3 por ciento ha interpuesto una denuncia.
El vocero de la Diócesis de Tabasco, Denis Ochoa, manifestó que la violencia de género es producto del machismo que sigue predominando en pleno Siglo XXI.
Es fruto de las familias, de una cultura de machismo y violencia intrafamiliar que no se ve públicamente pero subyace hasta en los niveles profesionales.
En el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, autoridades, sociedad civil y organizaciones no gubernamentales se pronuncian cada año por los casos de agresiones -e incluso muertes- de mujeres en Tabasco, pero en los hechos poco se ha logrado para reducir los índices de violencia.
Una historia “reciente”
La violencia contra la mujer se está haciendo cada vez más notorio en Tabasco. En el mes de julio del 2016, la Conavim notificó una serie de recomendaciones para garantizar una vida sin violencia a las mujeres, ya que el Comité de Derechos Humanos de Tabasco A.C. (Codehutab), dio a conocer que el aumento de feminicidios en la entidad.
En los últimos cinco años se han registrado 106 casos, pero cabe destacar que fue a partir de ese año cuando se empezaron a contabilizar, pues en esa fecha se tipificó en la entidad el delito de feminicidio.
¿Qué es el Feminicidio?
Feminicidio es un crimen de odio, consistente en el asesinato de una mujer por el hecho de ser mujer.
El concepto define un acto de máxima gravedad en un contexto cultural e institucional de discriminación y violencia de género, que suele ser acompañado por un conjunto de acciones de extrema violencia y contenido deshumanizante como torturas, mutilaciones, quemaduras, ensañamiento y violencia sexual contra las mujeres y niñas.
NÚMEROS QUE DUELEN
66.1% de las mujeres de Tabasco ha sufrido algún tipo de violencia
30.2% ha vivido situaciones de discriminación y abuso sexual en su lugar de trabajo
48.4% enfrentaron algún tipo de violencia de parte de su pareja
41.4% sufrió violencia emocional
27% padeció violencia económica
25.7% violencia física
8.4% violencia sexual