La Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos calificó de «lamentable» que el Senado de México haya aprobado la nueva y polémica Ley de Seguridad.
«Para la Oficina es lamentable que haya sido aprobada», afirmó en una rueda de prensa la portavoz de la Oficina, Elisabeth Throssell.
«No creemos que sea un paso positivo», señaló, e indicó que la posición personal del alto comisionado, Zeid Ra’ad Al Hussein, es que el principal valedor de la seguridad nacional sea la Policía no las Fuerzas Armadas.
«El país debería centrarse en reforzar la Policía nacional y no convertir a las Fuerzas Armadas en una parte fundamental de la seguridad interna», concluyó, y recordó que la Oficina ya se posicionó en contra de la Ley con anterioridad.
Varios grupos de Trabajo de Derechos Humanos de la ONU, así como diversos relatores especiales han criticado la ley por el peligro que existe de que incremente las violaciones a los derechos humanos en el país.
Estas instancias que velan por las libertades fundamentales han recordado que en el pasado integrantes de las Fuerzas Armadas han perpetrado «numerosos» y graves abusos a los derechos humanos y que en «muchos» de los casos estos crímenes han quedado impunes.