CAÑEROS, A MERCED DE ‘LAS TRES PLAGAS’

Joel Rubio/Francisco Uribe

Fotos: Jaime Ávalos

Cárdenas, Tabasco.

Bajo los intensos rayos del sol, José Luis Pérez López, se afana con el machete pocos minutos antes de la hora del almuerzo. Como él, cientos de productores trabajan en la zona cañera del poblado C-27 bajo duras condiciones.

Acostumbrados a esta ancestral labor, los jornaleros se mueven entre la caña quemada en las inmediaciones de este poblado, que a decir de los ejidatarios, es el de mayor productividad. La quema se realiza antes de trabajar en cada parcela por dos motivos: para espantar a las serpientes -que han llegado a herir gravemente a los trabajadores-, ahuyentar a las ratas y para facilitar el corte de la caña.

José Luis Pérez es un pequeño productor; uno de los tantos perjudicados por la baja rentabilidad de la caña a consecuencia de tres fenómenos: la sequía, las plagas y el bajo precio.

Durante la zafra 2018-2019, que se encuentra en su pleno apogeo, se pretende alcanzar una producción de un millón 478 mil toneladas, es decir, 100 mil toneladas menos de lo obtenido en la pasada cosecha. Una vez llevada al ingenio, se espera obtener una molienda de 150 mil toneladas de azúcar.

La superficie cañera de la cual se abastece el ingenio “Presidente Benito Juárez García” es de 25 mil hectáreas repartidas entre los municipios de Cárdenas y Huimanguillo, y de la cual 4 mil hectáreas pertenecen a la agrofactoría, 12 mil a productores de la CNC, 8 mil a la CNPR, y un mil a productores independientes, según explicó a Novedades de Tabasco el dirigente cañero Roberto de la Cruz Vázquez, quien advirtió sobre la necesidad de instrumentar un programa emergente de rescate de este sector que, hasta el momento, es el pilar de la economía de ambos municipios.

“Estamos en alerta debido a que la sequía nos está pegando fuerte, al igual que las plagas como la rata cañera y el gusano barrenador, que afecta a más de 2 mil 500 hectáreas”, dijo al señalar que el costo de la tonelada de caña entregada al ingenio es muy bajo, pues asciende a 776.08 pesos: “por lo cual esperamos que nos den subsidios o apoyos para mejorar nuestros campos con sistemas de riego y más infraestructura para la producción”.

“Estamos en alerta debido a que la sequía nos está pegando fuerte, al igual que el gusano barrenador, que afecta a más de 2 mil 500 hectáreas… esperamos que nos den subsidios o apoyos para mejorar nuestros campos con sistemas de riego y más infraestructura”

Roberto de la Cruz Vázquez

Líder cañero

La ‘pesadilla’ del cañaveral

Joel Rubio

El nombre común de este insecto es “gusano barrenador de la caña de azúcar” (Diatraea saccharalis Lepidóptera, Crambidae, antes Pyralidae), mismo que afecta actualmente a más de 2 mil 500 hectáreas de caña en el Plan Chontalpa.

Es un insecto que en su estado de larva se alimenta del tallo de la caña, perforándolo y barrenándolo internamente (de ahí su nombre), afectando así los rendimientos de producción de panela por hectárea, por eso es considerado uno de los insectos más perjudiciales en las plantaciones y dañino en todas las zonas donde se cultiva caña de azúcar, tanto para la industria azucarera como para la panelera, causando pérdidas a los agricultores y disminución de la calidad de los productos.

Cuando afecta plantas jóvenes que aún no han formado entrenudos, perfora el tallo por la parte basal, haciendo una galería en el interior y secando la hoja bandera… este es el síntoma de afectación llamado “corazón muerto”.

El síntoma de afectación de los cultivos de caña, cuando están con formación de entrenudos, es la perforación que hace la larva al ingresar al tallo. Una sola larva puede afectar varios entrenudos.

Cuarenta años de vida entregados al campo

Joel Rubio

Don Manuel Pérez Méndez se ha dedicado a la producción cañera desde hace cuatro décadas. Durante el periodo que comprende los meses de enero a junio es cuando más trabajo tienen los jornaleros que a diario ganan 120 pesos, pero esto ya no da para vivir, pues cada día los productos de la canasta básica son más caros y el salario no alcanza para mantener a una familia.

Con más de 60 años de edad, de los cuales 40 se ha dedicado a trabajar en los cañaverales, don Manuel comentó lo difícil que es este trabajo: “primero hay que labrar la tierra, después adecuarla, sembrar, cuidar y cosechar… es todo un proceso y siempre hay trabajo en el campo, nada más que ahora es más fácil con la ayuda de la maquinaria, pero lo duro es para la época de zafra, ya que conlleva un trabajo arduo y hay que sacar la producción”.

Este productor es oriundo del poblado C-28 en el municipio de Cárdenas, lugar donde se producen hasta 100 mil toneladas al año, siendo la principal actividad ecomómica, razón por la que la mayoría de sus habitantes son productores y jornaleros de este sector.

“Desde niño he vivido de esto… mi familia siempre ha sido cañera, mis padres me enseñaron a trabajar, tengo una parcela pero me deja muy poco porque es pequeño mi terreno, pero me ayudo con mi jornal y con eso mantengo a mi familia, aquí la situación es difícil, ahora que nos pegaron la sequía y las plagas es menos la producción y un producto de menos calidad no lo paga bien el ingenio”, comentó.

ZAFRA AMARGA

Ingenio Presidente Benito Juárez

Superficie: 25 mil hectáreas

4 MIL son del ingenio

12 MIL de productores de la CNC

8 MIL de la CNPR

1 MIL de productores independientes

PRODUCCION

2018 – 2019:

1 millón 478 mil toneladas

2017-2018

1 millon 575 mil toneladas

100 mil toneladas menos

MOLIENDA ESPERADA

150 mil toneladas

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