Glass, de M. Night Shyamalan, volvió a ser la película número uno en las taquilla de Estados Unidos y Canadá, mientras que a Serenity, estelarizada por Matthew McConaughey, no le fue tan bien. Mientras las nominadas a los premios Oscar sólo vieron avances modestos.
En un fin de semana tranquilo en las salas de cine de Norteamérica, Glass siguió siendo la película más vista el fin de semana, con un estimado de 19 millones de dólares en ingresos. Si bien no tuvo un desempeño tan bueno como Fragmentado, el lanzamiento anterior de Shyamalan, el nuevo filme ha ganado 73.6 m
illones de dólares en 10 días.
En el segundo lugar estuvo otra vez Amigos por siempre, de Kevin Hart. La comedia coprotagonizada por Bryan Cranston recaudó 12.2 millones en su tercer fin de semana de estreno.
A otros lanzamientos no les fue tan bien. La historia actualizada del rey Arturo en The Kid Who Would Be King debutó con sólo 7.3 millones de dólares. Green Book tuvo un empujón, tras las nominaciones al Oscar, y consiguió recaudar 5.4 millones en su onceavo fin de semana en cartelera.