Jaime Ávalos, fotoperiodista de Novedades, conduce el Tsuru hacia la comunidad El Naranjito por una solitaria carretera. Por el retrovisor del coche se dibujan las praderas de esta vasta tierra, delante de nosotros avanza a toda prisa la camioneta oficial donde viaja el alcalde de la comuna, Saúl Plancarte, y una reducida comitiva que nos lleva al encuentro con un grupo de arqueólogos.
Una vez en el punto de referencia, un frondoso rancho, un improvisado cerco le obliga a parar la marcha. En la escena aparecen un hombre y una mujer, él de rasgos orientales y ella de piel blanca. Se trata del doctor Takeshi Inomata y su esposa Daniela Triadan, ambos profesores de la School of Anthropology de la Universidad de Arizona, y responsables del proyecto al que se le denomina Aguada Fénix, la nueva zona arqueológica.
Después de caminar unos cuantos metros, el doctor Takeshi nos señala un extenso terreno donde asegura que se encuentra una gran plataforma de 1.2 kilómetros de largo por 400 metros de ancho, construida con arcilla de color negro, rojo y blanco, enterrada por millones de metros cúbicos de tierra. Bajo nuestros pies yace un mítico centro ceremonial maya que data de hace 3 mil años, dice el arqueólogo.
Este descubrimiento arqueológico podría cambiar la historia de la civilización del imperio maya, según las investigaciones realizadas, hasta estos momentos, por los especialistas que son financiados por la Universidad de Arizona, Fundación para Ciencia de Estados Unidos, el gobierno de Japón, la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), la Universidad Veracruzana y el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
Takeshi Inomata, arqueólogo de origen japonés, explica al reportero de esta casa editorial que gracias al apoyo de la tecnología LIDAR encontraron 15 nuevos sitios mayas de forma rectangular en la zona del río San Pedro en Balancán, donde se localiza Aguada Fénix.
Afirma que las imágenes aportadas por el mapeo LIDAR, que escanea el terreno con un láser que puede penetrar el dosel de vegetación a un ritmo de 560 mil puntos por segundo, ha permitido identificar rasgos arqueológicos únicos en imágenes 2D y 3D que constituyen «hallazgos de gran importancia» para el estudio de la cultura maya.
Haciendo uso de esa tecnología de escaneo láser, desde el año pasado los arqueólogos de la Universidad de Arizona empezaron a investigar más sobre el surgimiento de la civilización maya y su relación con los olmecas, centrándose en el área del río San Pedro, Balancán, y una parte del Usumacinta en el municipio de Emiliano Zapata, esto los llevó a descubrir Aguada Fénix.
Debido a las excavaciones, y después de ocho metros de profundidad, los investigadores llegaron a una parte más antigua, mirando los materiales se piensa que fue construida más o menos mil años antes de Cristo, es decir 3 mil años atrás.
El arqueólogo explica que este descubrimiento es muy significativo porque antes de 3 mil años no se sabía que la civilización maya se dedicaba al cultivo del maíz, por el contrario, se sabía que se dedicaban a la pesca y la construcción de grandes templos y ciudades.
Si bien se tiene una fecha tentativa de la construcción, se espera que las muestras de carbono revelen la fecha exacta de este sitio importantísimo para la civilización actual.
«Esta construcción es más antigua que Palenque, incluso que Tikal”, proclama con orgullo Daniela Triadan, y agrega que en su época sería, además, uno de los más grande del mundo.
Dicen que a través de esta tecnología han podido diferenciar entre naturaleza, sedimentos y estructuras arquitectónicas. Él está «seguro casi al 100%» de que lo que han encontrado no es un asentamiento cualquiera, sino que está a las puertas de lo que pudiera ser “la cuna de la civilización del imperio maya, en Balancán”.
Durante el recorrido, en el que participa el edil Plancarte Torres y el dueño del predio El Fénix, Jorge Luis Pérez Avendaño, llegamos a un punto donde se nos muestra una fosa de aproximadamente 1.5 metros de profundidad, de lo que sería un entierro de una persona, ubicada en el lado norte de la plataforma.
Tras analizarlas con detenimiento, sorprendida e impactada por su «hallazgo», otra arqueóloga guatemalteca muestra el sitio al matrimonio Takeshi Triadan. Hay que ser muy cautos porque no hay ningún dato que nos permita datar el asentamiento ni saber a qué profundidad se encuentra. Solo lo sabríamos excavando, pero resulta atractivo conocer con exactitud qué hay bajo esa tierra y la época de la que procede porque, sin duda, existe una obra humana, precisa el catedrático.
En la superficie del entierro apenas se observa una especie de cráneo, incluso, algo deteriorado, porque un trabajador que participa en la excavación por un descuido le asestó un golpe con el “pico”.
Oportunidad para ser destino arqueológico
El presidente municipal, Saúl Plancarte Torres, resalta que lo interesante de este proyecto es conocer la cuna de la civilización maya. “Para Balancán sería extraordinario que aquí fuera el origen de ese imperio, porque nos va a poner ante los ojos del mundo como uno de los destinos arqueológicos más importantes”, señala.
Considera lo importante que son los trabajos que se realizan en este lugar, pues la información que se ha estado obteniendo y las pruebas de carbono que están por revelarse, sin duda alguna pondrán a Balancán en la vista del mundo y la comunidad arqueológica.
El doctor Takeshi se muestra agradecido por todo el apoyo proporcionado por los gobiernos estatal y municipal, para continuar adelante con los trabajos. “La gente de Balancán es muy amigable y tenemos la fortuna de que hay seguridad”.
Tecnología LIDAR
Es un sistema que permite obtener una nube de puntos del terreno tomándolos mediante un escáner láser aerotransportado (ALS). Para realizar este escaneado se combinan dos movimientos. Las imágenes aportadas por el mapeo LIDAR, que escanea el terreno con un láser que puede penetrar el dosel de vegetación a un ritmo de 560 mil puntos por segundo, han permitido identificar rasgos arqueológicos únicos en imágenes 2D y 3D que constituyen hallazgos de gran importancia.
AGUADA FÉNIX
Extensión del predio: 4 kilómetros
Ubicación: Comunidad El Naranjito
HALLAZGOS
Una gran plataforma de 1.2 kilómetros de largo por 400 metros de
ancho
Vasijas
Entierros
Escalinatas
Periodo: 3 mil años después de Cristo
Patrocinan el proyecto: Universidad de Arizona, Fundación para Ciencia de Estados Unidos, el gobierno de Japón, la UNAM, la Universidad Veracruzana y el INAH.
ARQUEÓLOGOS
Doctor Takeshi Inomata, profesor e investigador de la School of Anthropology de la Universidad de Arizona
Daniela Triadan, profesora e investigadora de la School of Anthropology de la Universidad de Arizona
EL NARANJITO
Tiene 675 habitantes, está a 50 metros de altitud. El 4.15% de la población es indígena, y el 1.78% de los habitantes habla una lengua indígena. Esta comunidad se encuentra ubicada a casi 60 kilómetros de la cabecera municipal, se puede llegar en carretera, en la ruta que conduce al poblado San Pedro.
SITIOS MAYAS MÁS ANTIGUOS
Tik’al (900 d. C.)
Palenque (800 d.C)
ZONAS ARQUEOLÓGICAS DE BALANCÁN
Moral o Reforma
El Arenal
Santa Helena
Tierra Blanca
Pomoná
Tiradero
El cuyo del Nava
La Tierra Alta
Reciente hallazgo: cráneo de Halcón, gobernante Moral-Reforma, representado en el frente de la Estela 4, mismo que dada del año 687 o 689 d.C