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Una posible venganza entre dos grupos de narcotraficantes por la venta de drogas, ha sido señalada por la Fiscalía del estado como línea de investigación principal en torno al ataque registrado el viernes santo en una fiesta en el municipio de Minatitlán, donde perdieron la vida 13 personas, informó su titular Jorge Winckler.
Aunque el fiscal optó por no señalar la participación específica de los grupos criminales, se sabe que se trata de una disputa entre los Zetas y el Cártel Jalisco Nueva Generación.
Un dato relevante que se informó es que, en contra de lo se difundió inicialmente, el asesinato se dirigió efectivamente contra una persona en particular en un inicio, pero después uno de los sicarios habría disparado indiscriminadamente contra quienes se habían tendido en el suelo (entre las víctimas fatales está un niño de un año), versión de los testigos presenciales que descartaría la versión de que los invitados a la fiesta trataron de proteger al sujeto buscado por los criminales.
El Fiscal indicó que el ataque que dejó 13 personas sin vida, está vinculado a la disputa por dos bares de la zona en donde se vende droga y explicó que fueron entre 5 y 6 hombres armados quienes usando pasamontañas llegaron y se dirigieron a la mesa en donde agredieron a las personas, se sabe que en el lugar había cerca de 40 invitados.
Informó que hasta el momento se han realizado 207 diligencias, 19 entrevistas con las personas que sobrevivieron y con algunos vecinos, 48 dictámenes periciales, 4 inspecciones al lugar y se han encontrado 8 objetos posiblemente vinculados con los agresores.
Aseguró que ya solicitaron videos del lugar para identificar los automóviles utilizados y así hacer un seguimiento de la ruta de huida de los atacantes. Además de que se está investigando al propietario del centro de fiestas donde ocurrió el ataque.
Agregó que como parte de las investigaciones horas después del ataque, se aseguró una casa en la que se encontraron un número importante de chips de teléfono celular, memorias usb, armas y dos vehículos con reporte de robo.
Winckler dijo que se han identificado por complexión y vestimenta a los atacantes, pero no por nombre o apodo. Sin embargo, se solicitó a la Secretaría de Seguridad Pública del estado información sobre dos atacantes identificados.
Los testigos señalaron a un sujeto de nombre Julio César González Reyna alias La Becky, dueño de dos bares en la zona, como el objetivo de los sicarios, quienes al perpetrar el ataque dijeron “Con esto no se juega”, antes de disparar.
La llegada del vehículo en el que llegaron los asesinos fue detectado por los testigos de los hechos, además de que a través de ellos se pudo saber a quién buscaban. Aparentemente, pues el fiscal no lo dejó completamente claro, los asistentes tenían cierto conocimiento de las actividades de La Becky.
Los Zetas eran el grupo dominante de esa zona de Veracruz hasta que el desgaste por la persecución gubernamental y su enfrentamiento con otros grupos los hizo cada vez menos influyentes. Por el contrario, el debilitamiento de grupos otrora poderosos, hizo que el Cártel Jalisco Nueva Generación (originado en Jalisco como apéndice de bandas michoacanas) comenzará a crecer hasta convertirse en el más relevante a nivel nacional en este momento.
