Fotos: Jaime Ávalos
Un recorrido por la zona agrícola-ganadera de los ejidos que comprenden el Plan Balancán-Tenosique pone en evidencia la precaria situación en la que está sumergida desde hace dos meses por la falta de lluvias. El abandono condena a la región a morir poco a poco.
“Nos dicen que la sequía va a continuar”, señala Antonio Rivera de la Cruz mientras saca agua de un jagüey para llevarla a unas palanganas donde sus becerros, vacas y caballos llegan a beberla.
El pequeño productor relata que los animales están debilitándose por la falta de agua y advierte que no tienen las herramientas para sobrellevar la situación: “No contamos con un sistema de riego, no estamos preparados para aguantar dos meses más esta sequía”. Una de sus vacas ya murió.
El caso de Antonio, del ejido Punta de Montaña perteneciente a Tenosique, es uno de muchos. La mayoría de los productores reportan pérdidas económicas.
Tenosique, municipio que es parte de Los Ríos, tiene una extensión territorial de 2 mil 98 kilómetros cuadrados, lo habitan 58 mil 960 personas, de acuerdo a un censo del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) en 2010.
Cuenta con 73 ejidos, 15 rancherías y 11 poblados donde las principales actividades son la agricultura y la ganadería, la cual se practica de manera extensiva en la cría de ganado bovino. También es un importante productor de ovinos y en menor escala porcinos y aves.
FALTA ALIMENTO
La muerte de animales es más frecuente en las comunidades que se encuentran en los límites con Guatemala, donde la tierra se está agrietando por la falta de agua.
“Esa vaca acaba de parir”, dice con orgullo José Guadalupe Izquierdo López, el resto de sus animales están flacos, casi en los huesos. Su pozo apenas tiene un poco de agua, la tierra está seca y agrietada.
José vive en la comunidad El Palmar, para darle de comer a sus animales tiene que comprar un alimento que le cuesta entre 900 y mil 200 pesos semanales. “No hay forma de conseguir pastura fresca, tenemos que invertir, ojalá valga la pena”, dice esperanzado mientras les da un poco de agua a sus perros.
LOS RÍOS, ZONA COMPLICADA
María Luisa Frías Almeida, de la Unión Nacional de Trabajadores Agrícolas (UNTA), señala que han registrado la muerte de 250 semovientes, “esto va a afectar no nada más la cuestión productiva, sino también la economía de los productores”. La UNTA califica a Los Ríos como la zona más complicada porque también se ve afectada por el estiaje en el Usumacinta.
En Balancán hay el mismo problema, la zona ha perdido productividad, los animales buscan donde refugiarse de los rayos solares pero los árboles están secos y no tienen hojas para protegerlos.
El municipio tiene una extensión territorial de 3 mil 626 kilómetros cuadrados y lo habitan 56 mil 739 personas. Tiene 48 ejidos, 38 rancherías, seis poblados, tres colonias rurales y dos villas.
La ganadería es la actividad más importante para la economía local y se practica de manera extensiva; en la agricultura destaca por su producción de cultivos básicos como maíz, arroz, sorgo, frijol y hortalizas como la sandía.
Por la sequía los campos y animales están muriendo, en la comunidad Hulería ya hay un cementerio clandestino de reses que utilizan los pequeños productores para evitar que los restos infecten a otros animales o la tierra.
Remedios Cerino García relata que alimenta a su ganado con caña, es lo único que hay, le cuesta 400 pesos el tiraje de un camión y le rinde un mes.
Es uno de los productores que no utiliza el cementerio, al señalar a una vaca que murió hace cinco días explica que la dejó donde “se echó”.
“No contamos con un sistema de riego, no estamos preparados para aguantar dos meses más esta sequía”
Antonio Rivera de la Cruz
Productor
“No hay forma de conseguir pastura fresca, tenemos que invertir, ojalá valga la pena”
José Guadalupe Izquierdo López
Productor
“Esto va a afectar no nada más la cuestión productiva, sino también la economía de los productores”
María Luisa Frías Almeida
Secretaria de organización del Comité Estatal de la Unión Nacional de Trabajadores Agrícolas (UNTA)
PLAN BALANCÁN-TENOSIQUE
- Nació en 1972 como un proyecto orientado a la ganadería y en menor escala a la agricultura
- Superficie: 115 mil 668 hectáreas
- 75% pertenece a Balancán
- 25% pertenece a Tenosique
- Hato: más de 250 mil reses
Han muerto 250 reses y los ejidatarios advierten que no podrán soportar dos meses más así
Los campos ya lucen agrietados y se prevé que se extienda la sequía
En la comunidad Hulería ya hay un cementerio clandestino
La Unión Nacional de Trabajadores Agrícolas advirtió el impacto que tendrá en el bolsillo de quienes se dedican a estas actividades
La situación en el Usumacinta agrava lo que ocurre en Los Ríos