Los estadunidenses conmemoran hoy 18 años de los atentados terroristas con ceremonias, voluntariado, exhortos a ‘nunca olvidar’ y llamados de atención al creciente número de socorristas que han muerto o enfermado tras los ataques.
Las conmemoraciones comenzaron a primera hora de la mañana en la Zona Cero con un minuto de silencio y el tañido de campanas.
En presencia de familiares de las víctimas y dignatarios en la plaza conmemorativa en el Centro de Comercio Mundial en Nueva York, la ceremonia inició precisamente a las 8.46, la hora en que un avión secuestrado se estrelló contra la torre norte del Centro de Comercio Mundial el 11 de septiembre de 2011.
Los familiares de las víctimas iniciaron la lectura de los nombres de casi 3 mil personas que murieron cuando cuatro aviones secuestrados se estrellaron contra las Torres Gemelas, el Pentágono y un campo en Pennsylvania.
En la Casa Blanca, por su parte, el presidente Donald Trump guardó un minuto de silencio, acompañado de su esposa Melania y de numerosos funcionarios y políticos, en el ala sur de la residencia presidencial.
Posteriormente, Trump asistirá a una ceremonia en el Pentágono y el vicepresidente Mike Pence hablará en el monumento conmemorativo cerca de Shanksville, Pennsylvania.
Los legisladores también rindieron tributo con un minuto de silencio en el Congreso.
HERIDA QUE NUNCA CERRARÁ
Dieciocho años después de los ataques terroristas más mortales en territorio estadunidense, la nación sigue tratando de reponerse.
Las secuelas de los atentados pueden notarse desde las inspecciones de seguridad en los aeropuertos hasta Afganistán, donde la invasión después del 11S se ha tornado en la guerra más larga de Estados Unidos.
En los últimos años ha habido una creciente concientización sobre el sufrimiento de otro grupo de personas relacionada a la tragedia: los bomberos, policías y otros socorristas que murieron o se enfermaron tras estar expuestos a los escombros y toxinas en el aire de la zona.
Aunque continúa investigándose si esas enfermedades están ligadas a las toxinas del 11S, un fondo de compensación para personas con problemas de salud potencialmente relacionados a los atentados ha entregado más de 5 mil 500 millones de dólares hasta ahora.
Más de 51 mil personas han solicitado compensación.