Doce países del continente americano dieron este miércoles un primer paso en la reactivación del Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca (TIAR) al considerar que la “crisis” en Venezuela representa “una clara amenaza a la paz y la seguridad” en la región.
Las 12 naciones que apoyaron el TIAR (una especie de OTAN americana que abre la puerta a la intervención militar) son: Argentina, Brasil, Chile, Colombia, El Salvador, Estados Unidos, Guatemala, Haití, Honduras, Paraguay, República Dominicana y Venezuela, esta última representada por los delegados del líder opositor venezolano Juan Guaidó.
La decisión se tomó en la Organización de Estados Americanos (OEA), que ejerce como testigo del TIAR, firmado originalmente en 1947. Dentro de dos semanas, en la Asamblea General de la ONU, los 12 países se reunirán para decidir con qué medidas tratarán de presionar a Maduro.
INTERVENCIÓN, SÍ PERO NO. La opción más agresiva que incluyen los estatutos del tratado es la posibilidad del “empleo de la fuerza armada”, pero por el momento algunos países, como EU, han dicho que esa opción no está sobre la mesa.
SERVICIO A EU. El régimen venezolano calificó de “infame” la reactivación del TIAR y consideró que los 12 firmantes están “alineados con los intereses del gobierno supremacista de EU”
RECHAZO MEXICANO. México era uno de los países que ratificaron el TIAR hace 72 años, pero se retiró del mismo en 2002, y este miércoles votó en contra de la reactivación del pacto militar. La embajadora mexicana ante la OEA, Luz Elena Baños, aseguró que invocar este tratado militar “es un retroceso y una contradicción que profundiza la división en la OEA”.
La reactivación del TIAR llega mientras el régimen de Maduro realiza ejercicios militares en la frontera con Colombia, en un pulso con el presidente colombiano, Iván Duque.
TRUMP AFIRMA QUE BOLTÓN SE “PASÓ DE LA RAYA” CON CARACAS E INSINÚA NEGOCIACIÓN. El presidente de EU, Donald Trump, dijo este miércoles que su exasesor de Seguridad Nacional, John Bolton, se “pasó de la raya” en la política hacia Venezuela.
“Yo estaba en desacuerdo con John Bolton en sus actitudes sobre Venezuela”, afirmó el mandatario desde el Despacho Oval, antes de añadir: “Y creo que se ha demostrado que yo tenía razón”.
Cuestionado por si su doctrina en lo relativo a Venezuela podría cambiar ahora que Bolton ha abandonado su cargo, Trump se limitó a indicar que tiene una “política firme” hacia ese país.
El mandatario dejó entrever que su prioridad es la asistencia humanitaria en el país caribeño, y no “aplastar al régimen terrible” de Nicolás Maduro.
Sin embargo, y a pesar de que Trump ha reconocido que ha tenido conversaciones “de muy alto nivel” con el chavismo, Trump no quiso responder a la pregunta de si está dispuesto a reunirse con Maduro. “No quiero hablar sobre eso”, zanjó el mandatario.