Nacajuca. – En la inauguración del Segundo Concurso de Altares Comunitarios Yokot’anob, la secretaria de Cultura, Yolanda Osuna Huerta, aseguró aquí que el evento sintetiza el pasado, presente y futuro, porque vincula creencias, costumbres y tradiciones que nos dan sentido de mexicanidad.
En compañía de la presidenta del Sistema DIF Tabasco, Dea Isabel Estrada Rodríguez de López, destacó que la figura de la muerte no solamente la vemos en casi todas las bellas artes, como la literatura, artes plásticas, música y pintura, sino en la cultura popular y las costumbres de nuestros pueblos indígenas.
En el parque central de este municipio, Osuna Huerta dijo que un considerable número de actividades se realizan en este Día de Muertos, que «nos llevan a escribir una nueva historia, como han convocado el presidente Andrés Manuel López Obrador y el gobernador Adán Augusto López Hernández, quién es un promotor de un proyecto cultural en Tabasco que nos dé identidad y participación a todos, porque la cultura es un factor de cohesión social».
En presencia del secretario de Bienestar, Sustentabilidad y Cambio Climático, Mario Llergo Latournerie y la alcaldesa de Nacajuca, Janicie Contreras García, señaló que la celebración del Día de Muertos y los altares estrechan lazos familiares y de amistad, para celebrar juntos a los fieles difuntos.
El Segundo Concurso de Altares Comunitarios Yokot’anob, tuvo como objetivo enaltecer el legado cultural y las costumbres ancestrales de los pueblos originarios de Tabasco y se realiza en el marco del Día de Muertos, considerado por la UNESCO obra maestra del Patrimonio Cultural de la Humanidad, de ahí la importancia de conocer los usos y costumbres de los antiguos chontales, a través de la ofrenda de altar de muertos.
La presidenta municipal de Nacajuca, aseveró que el concurso es tradición y cultura de la tierra chontal. «Es la unión de vivos y muertos, es la costumbre de ir a los panteones a visitar a nuestros muertos para mantenerlos vivos», afirmó en presencia del subsecretario para el Bienestar de Pueblos Indígenas, Rodolfo Frías Pulido y los diputados locales Daniel Cubero Cabrales y Jessica Mayo Aparicio.
Sebastián Ruiz de la Cruz, encargado de la Oficina del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI), ofreció la exposición de motivos del concurso, en la que describió la importancia que tiene la muerte en los mexicanos y el homenaje que los pueblos originarios le hacen desde hace miles de años.
El jurado calificador del concurso estuvo conformado por el diputado federal, Ricardo de la Peña Marshall; la directora del Cenepred, Isi Verónica Lara Andrade; el director de Culturas Populares de la Secretaría de Cultura, José Hernández Reyes y los estudiosos de la cultura de Nacajuca, Arturo Ramón Ramírez y Miguel Sánchez Morales.
Los invitados especiales y autoridades hicieron un recorrido por los altares participantes en el concurso y conocieron a detalle sus principales elementos. Se presentaron altares del poblado Tucta, ranchería San Isidro primera sección y del poblado Guaytalpa.
El primer lugar fue para el altar del poblado Tucta, a cargo de Luis Felipe Magaña Sánchez. El segundo lugar fue para Cresencio Arias Torres, del poblado Guaytalpa y el tercer lugar para Filadelfo Román de la Cruz, del poblado Tucta.
El programa cultural de la velada estuvo conformado por el Ballet Independiente y Contemporáneo de Nacajuca, la compañía Kynesia Cultural, la obra de teatro «Noche de difuntos» y la Orquesta Cultural de Nacajuca, entre otros participantes.