El expresidente ecuatoriano Rafael Correa, que vive en Bruselas desde que dejó el cargo en 2017, aseguró ayer en una entrevista concedida al diario El País que considera la opción de tratar de regresar al gobierno, pero que no vale la pena que se presente a unas elecciones, sea como candidato a presidente o a vicepresidente, porque “acabaría como Lula (Da Silva)”.
Durante la charla con el diario, registrada el miércoles, Correa afirmó que sí le interesaría una fórmula similar a la que siguió la expresidenta argentina Cristina Fernández, quien ahora será la nueva vicepresidenta del país en el gobierno de Alberto Fernández.
Sin embargo, aseguró que “llegarán las trampas, (dirán) que tengo que inscribirme personalmente, lo cual es mentira, pero las acepto: yo voy, me inscribo y me meten preso”. “No nos lo van a permitir, va a ser lo mismo que con Lula”, lamentó.
“Entiendan que con lo de Lula no sólo le robaron la libertad, le robaron la democracia a Brasil, porque si Lula hubiera sido candidato, que tenía derecho a serlo, el presidente actual sería él. Yo no estoy preso porque vivo fuera del país”, remachó Correa, en referencia a los procesos abiertos por corrupción en su contra por su sucesor, Lenín Moreno, con quien está enemistado.