Agarrón en el Senado

Entre golpes, forcejeos, gritos y una lluvia de pancartas de “fraude”, Rosario Piedra Ibarra rindió protesta como Presidenta de la CNDH.

Una toma de protesta que duró apenas un minuto e hizo recordar la toma de protesta de Calderón como Presidente, en el 2006, en medio de una trifulca entre lopezobradoristas y panistas. Una toma de protesta a mitad de una batalla cuerpo a cuerpo entre panistas y morenistas (estos últimos formaron dos cinturones de seguridad alrededor de la Mesa directiva del Senado para obstaculizar la llegada de la bancada albiazul).

El panista Gustavo Madero logró colarse hasta la silla de la presidenta del Senado, Mónica Fernández, pero poco le duró el gusto pues las morenistas Martha Guerrero y Citlalli Hernández lo taclearon y se aseguraron de mantenerlo en el suelo. El coordinador del PAN, Mauricio Kuri, trató de lanzarse en su defensa, pero fue contenido por sus compañeros ante lo que perfilaba una gresca generalizada.

Explotó así la tensión y frustración de los panistas contenida desde el jueves pasado y a lo largo de este martes. El Senado se convirtió en un pandemónium, donde prevalecían confusión, gritos, manotazos, pancartas con leyendas de fraude que alzaron los panistas en el rostro de Piedra Ibarra al momento en que rendía protesta.

“¡Fraude, fraude, fraude!”, le gritaban a la hija de Rosario Ibarra de Piedra.

Las típicas arengas de los movimientos de izquierda estallaron en el Pleno del Senado para apagar las protestas panistas. “De Nooorte a Suuur de Essste a Oesteeee, ganaremos esta lucha cueste lo que cueste”, y el “¡ Sí se pudo, sí se pudo!”.

Las bancadas de Movimiento Ciudadano, PRD, pero sobre todo el PRI (coptada por Morena de última hora para investir a la nueva Ombudsperson) se mantuvieron a la expectativa. El coordinador del tricolor, Miguel Ángel Osorio Chong tratando de justificar su voto decía: “nosotros queríamos que se repusiera todo el proceso”, justificó.

Desde su lugar, el coordinador de Morena, Ricardo Monreal sin recato mostraba una enorme sonrisa, acompañado del expanista, Germán Martínez y el michoacano Cristóbal Arias. Se había cumplido la línea presidencial.

Atrás quedó el cabildeo fallido con la oposición para tratar de obtener la mayoría calificada en la reposición del proceso al que Monreal se había comprometido con el PAN.

Y es que a Monreal le faltaban siete votos para alcanzar la mayoría calificada en caso de que se hubiera repuesto la votación. Piedra Ibarra no pasaba por las buenas, pero pasó a como dio lugar.

“CERDOS, MARRANOS, COCHINOS …” En solo seis horas se pasó del compromiso de Morena para limpiar y reponer el proceso de elección, a la reversa y a rechazar la propuesta del coordinador morenista Ricardo Monreal. El zacatecano había pactado con el coordinador del PAN, Mauricio Kuri, reponer aquella votación que generó gran polémica, una lluvia de descalificaciones y acusaciones de fraude desde el pasado jueves.

En sólo seis horas los panistas pasaron de la algarabía al desencanto y la frustración. Del reconocimiento a la mayoría de Morena por su apertura a las acusaciones de “simulación”, fraude y doble discurso.

“Cuando un ser humano empeña su palabra y no la cumple pierde su credibilidad; Monreal sabía que no tenía los votos por eso prefirió no cumplir su palabra… lo de ‘cerdos, marranos y cochinos’ que dice su Presidente les queda perfectamente”, fustigó la senadora del PAN Xóchitl Gálvez.

Un debate donde el PRI se mantuvo a la expectativa, sin involucrarse e incluso votó en contra de la propuesta de Monreal para que se repusiera la elección de la tercera votación de la terna donde ganó Piedra Ibarra con el argumento de que “se debía reponer todo el proceso”. Así, el tricolor abrió la puerta a que todo se quedara como estaba y la nueva Ombudsman fuese investida con dos desaparecidos de por medio, aquellos votos que no se contabilizaron.

De poco valieron las sugerencias y demandas a Piedra Ibarra para que no tomara protesta y exigiera se repusiera la elección a fin de limpiar ese proceso.

“Le están haciendo mucho daño al Senado, a la CNDH y a Rosario Piedra Ibarra, con esto están destruyendo un organismo autónomo, qué lástima que llegaran al poder para esto…”, fustigó la presidenta de la Comisión de Derechos Humanos del Senado, Kenia López.