Después de tres horas de subasta de diferentes joyas que no generaron mayor interés, los asistentes parecieron despertar de su letargo, cuando llegó el momento de los autos de lujo. En la última hora de subasta el ánimo de los asistentes los llevó a brincar en el precio base hasta por un millón de pesos en la primera puja.
Un vehículo Ferrari 488, con precio base de dos millones 986 mil 300 pesos recibió en su primera oferta un empujón de más de un millón de pesos hasta los cuatro millones de pesos, y todavía se vendió 900 mil pesos por encima de ese rango.
Las paletas se intercalaban una a otra con la mejor oferta que apenas duraba unos cuantos segundos. La puja iba subiendo de 50 mil en 50 mil pesos de un postor a otro. Cinco participantes querían llevarse el auto: era el turno de un Lamborighini Huracán Coupé 2019.
El precio base fueron los tres millones 402 mil 900 pesos pero el postor final acabó ofreciendo cinco millones 600 mil pesos. El dueño, un señor con la paleta marcada con el número tres, no sólo se llevó ese único vehículo. También participó en la puja por dos autos McLaren 720S Coupé, por cuatro millones 275 mil pesos y otro McLaren 600 LT convertible, por tres millones 675 mil pesos.
Era la madre de todas las subastas organizada por el Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado (Indep), quinta subasta en lo que va de la presente administración, en la cual, tan sólo por la venta de vehículos de lujo se logró recaudar 28 millones 685 mil pesos.
Al término del evento realizado en el Complejo Cultural Los Pinos, Ricardo Rodríguez Vargas, titular del citado instituto, recordó que lo recaudado se irá a la rehabilitación de caminos de La Yesca, en el estado de Nayarit y en Atarjea, en Guanajuato, como parte de lo que se ha denominado como obras con sentido social.
Estimó: la subasta fue un “éxito, en el sentido de que se vendieron las joyas de la corona. Ayer la casa de Santa Feéy hoy los vehículos machuchones, algunos de ellos se vendieron por encima de lo esperado. Creo que hubo una fuerte puja e interesante en la mayoría de éstos. Tuvimos una recaudación con un broche de oro al final de la subasta”.
Adelantó que el próximo año se seguirá trabajando con estas subastas con sentido social, gracias a la ley de extinción de dominio “que nos va a permitir (conseguir) una gran cantidad de bienes diversos, como ya lo vieron: aeronaves, joyas, vehículos, casas y demás bienes que podamos asegurar durante el año”.
Durante la jornada se vendieron poco más de 50 lotes, entre joyas, una de ellas cabe mencionar, fue la de mayor valor: un reloj marca Piaget, fabricado en oro blanco de 18 quilates y con más de 200 diamantes, el cual fue vendido en su precio base de un millón 476 mil 900 pesos al primer y único postor (este reloj ya había sido subastado en ocasiones anteriores y no había logrado venderse), seguido de un anillo en oro blanco de 14 quilates con un diamante corte marquise, y 113 diamantes de .01 y 10 quilates.
El momento más largo de la subasta fue cuando alrededor de las 12 del día se continuó con la oferta de lotes de joyas, sin embargo, fueron presentados uno a uno 73 lotes de anillos, dijes, broqueles y ninguno despertó el interés de nadie, hasta que la paleta 135 se levantó para adquirir el lote 541 integrado por anillos en oro amarillo, con un valor de 71 mil 400 pesos, oferta que fue agradecida por la martillera, quien incluso, al micrófono dijo “gracias por despertarnos”, lo que provocó la risa de los asistentes.
Ricardo Rodríguez Vargas, resaltó que en conjunto, los lotes vendidos permitieron recaudar alrededor 50 millones de pesos, en los dos días de subasta de este fin de semana, sin embargo, habrá que sumar la cifra correspondiente a las aeronaves que algunos gobiernos de los estados han manifestado su interés “con lo que esa cifra pudiera estar subiendo alrededor de 20 millones de pesos más”.
Cabe mencionar que de 316 lotes de joyas subastados, apenas 33 despertaron el interés de los participantes, entre ellos, las dos mencionadas párrafos arriba, y los precios de las compras variaron desde los 5,200 pesos, 52 mil 500 hasta los 97 mil.
Por ello, el director del INDEP, Rodríguez Vargas señaló en el caso de lo que no se vendió se reforzarán las estrategias de mercadotecnia, sobre todo en la parte de joyas, la mayoría de las cuales fueron incautadas porque fueron introducidas de manera ilegal al país, incluso si no se venden en subastas “ver con grupos de joyeros, de tal manera que los rendimientos para el Estado sean los mejores”. En cuanto a la compra de garantías por parte de los interesados, indicó que estas fueron 168.
Mención especial merecen los vehículos blindados niveles 4, 5 y 6, de ellas 14 eran de la Presidencia de la República, y dos más de la Fiscalía General de la República, y cuyos precios iban desde los 250 mil hasta los 647 mil, el más caro, tampoco despertaron el interés de ninguno de los asistentes.