Con más de 16 años de trayectoria como artesana en pintura popular en Tabasco, Imelda Castillo Córdova se autodenomina como la creadora de un nuevo concepto, al que ella misma ha llamado “el surrealismo choco”.
Nacida en Villahermosa, Mey Castillo –como se presenta artísticamente– se declara orgullosamente tabasqueña y se asume como una firme y decidida promotora de la cultura, las artes y las costumbres del Estado.
La convicción por mostrar al mundo la riqueza cultural de su tierra natal, la llevó a sumarse al equipo del Instituto para el Fomento de las Artesanías de Tabasco (IFAT), al que pertenece desde hace cinco años.
“Mi estandarte es el surrealismo choco”, se define y explica que a través de este movimiento logró imprimir a su obra un sello propio, mediante el cual transforma con sus manos mágicas la belleza natural del edén, así como a sus principales personajes y monumentos.
Los colores vibrantes en técnica de acuarela predominan en su obra artística, lo hace, según dice, porque “es algo que se trabaja muy rápido”.
Sus pinturas plasman desde la virtuosidad de la mazorca del cacao hasta árboles típicos como el guayacán y el macuilis, alma de la primavera en el también conocido ‘infierno verde’.
“En mi obra busco promover la cultura de una forma más moderna, nada tradicional”, precisa, quien también explica que siguiendo este propósito no sólo pinta en lienzo, sino también en prendas de vestir, moños para niñas, llaveros y otros objetos de uso cotidiano.
La intención, abunda, no es sólo ver el arte o la artesanía como un objeto de adorno o inerte; “también podemos apropiárnosla en nuestro uso común, en nuestra vida diaria”, establece.
Actualmente Mey Castillo pertenece al Padrón de Artesanos del IFAT y sus productos se comercializan a través de las cuatro tiendas ArteSano que la institución tiene instaladas en Galerías Tabasco 2000, el parque Tomás Garrido, el aeropuerto internacional “Carlos Rovirosa”, y el Museo Interactivo “Papagayo”, además de una más en el Estado de Chiapas.
Maestra en arte plástica desde hace 15 años en la sala infantil de la biblioteca “José María Pino Suárez”, también ha participado en diversas exposiciones colectivas de pintura, fotografía y grabado.
Puntualiza que su misión como promotora de las artesanías tabasqueñas, a través del IFAT, es que “todos nos sintamos orgullosos de nuestra tabasqueñeidad, de lo que somos y de lo que podemos ofrecer al mundo”.