Tabasqueños en pobreza habitan ciudades perdidas

De 2014 a 2018 un total de 42 mil tabasqueños se sumaron a las cifras de personas que viven en pobreza extrema, de acuerdo con el más reciente indicador presentado por el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).

El documento, dado a conocer por ese organismo, asienta que en 2014 existían 260 mil personas en pobreza extrema y para 2018 el número creció a 302 mil, lo cual indica que los programas sociales del anterior régimen federal y estatal no tuvieron efectos positivos para revertir los índices de marginación social en la entidad.

Reflejo de esa situación son las “ciudades perdidas” que se observan en la capital del estado, en ellas habitan decenas de familias que ya se han acostumbrado a vivir en ese tipo de condición social.

En un recorrido que Novedades de Tabasco realizó por distintos puntos de la periferia de la capital, se observó que existen alrededor de seis “ciudades perdidas”, con serios problemas de marginación, falta de seguridad y servicios municipales.

También conocidos como “cinturones de miseria”, se ubican dentro de colonias populares, la mayoría de ellos se encuentran en asentamientos irregulares.

La falta de servicios e infraestructura ha hecho que esos lugares estén en decadencia, además, la seguridad es muy deficiente y la delincuencia se ha apoderado de ellos.

Las personas que viven en esas localidades son de muy bajos recursos y como han podido han levantado sus hogares con madera, láminas e inclusive asbesto; todos carecen de caminos pavimentados, alumbrado público y agua potable; aun así, solicitan la intervención de las autoridades para que esas necesidades sean suplidas.

¿EN DÓNDE ESTÁN?

Estas “ciudades perdidas” se encuentran en la colonia Mayito, la más antigua en la ciudad; “el Coso”, ubicado en la colonia el Espejo 1; en la calle Revolución de la colonia Atasta y el sector Manuel Andrade.

Don Julio Cesar Jiménez, habitante de la colonia Mayito señaló: “este sitio es de los más antiguos de Villahermosa, eran predios del gobierno en los que transita un canal de alivio, aquí la gente se fue metiendo y ya no la pudieron sacar; este lugar tiene salidas para muchos lados, por eso se les complica a las autoridades mantener el orden”.

Angélica Ramos Frías habitante de la colonia Espejo 1, comento: “desde hace 30 años este lugar sigue igual, muy poco se ha invertido en la zona, con trabajo nos dan agua, el alumbrado público es deficiente, hay asaltos entrando la noche, ya se volvió muy peligroso”.

Asimismo, Jimena Ortiz Mena, de la calle Revolución, de Atasta, expresó: “mucha de la gente que vive aquí es de bajos recursos, algunos son albañiles, otros recolectores de fierro viejo y de otros trabajos, pero como somos pobres no nos voltean a ver”.

Las personas que viven en extrema pobreza buscan lugares que son propiedades estatales o federales para invadir y construir sus pequeñas casas ya que no tienen el ingreso suficiente para pagar una renta.

EL DATO

  • Entre 2014 y 2018, 42 mil tabasqueños han pasado de pobreza moderada a pobreza extrema; en 2014 eran 284 mil 200, y cuatro después la cifra creció a 302 mil 500

DONDE VIVE LA MARGINACIÓN

COLONIA MAYITO

  • 300 habitantes
  • 50 años de antigüedad
  • Mucha inseguridad
  • Guarida de maleantes y alcohólicos

EL COSO, ESPEJO 1

  • 400 habitantes
  • 40 años de antigüedad
  • Falta de alumbrado, inseguridad y venta de drogas
  • No hay caseta policiaca a más de 1 km

CALLE REVOLUCIÓN, ATASTA

  • 100 habitantes
  • 40 años de antigüedad
  • Sin pavimentar, sin seguridad, sin alumbrado publico
  • Urgen servicios municipales

SECTOR MANUEL ANDRADE

  • 2000 habitantes
  • 20 de antigüedad
  • Sin pavimentar, sin seguridad, sin alumbrado publico
  • Ubicación: ranchería Miguel Hidalgo

“Mucha de la gente que vive aquí es de bajos recursos, algunos son albañiles, otros recolectores de fierro viejo y otros trabajan en otra cosa”

Jimena Ortiz Mena

Habitante de Atasta

“Aquí la gente se fue metiendo y ya no la pudieron sacar; este lugar tiene salidas para muchos lados, por eso se les complica a las autoridades mantener el orden”

Julio César Jiménez

Habitante de Mayito

“Con trabajo nos dan agua, el alumbrado público es deficiente, hay asaltos entrando la noche, ya se volvió muy peligroso”

Angélica Ramos Frías

Habitante del Espejo 1

La mayoría no tiene servicios básicos como pavimentación, drenaje, agua potable y alumbrado público

FOTOS: JAIME ÁVALOS

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