Desde el mediodía vecinos, amigos, familiares, madres indignadas esperaban a las afueras de la casa de Fátima; a las 18:40 horas los padres de la menor arribaron al sitio, momentos después el vehículo con el féretro. Cientos de gritos a una sola voz: «Justicia para Fátima».
«Por todas las mujeres que han lastimado, por las que han estrangulado y asesinado, no sólo por mi hija, queremos justicia, nadie me va a regresar a mí hija, no me quiero ir, ¡quiero justicia!».
Fue el grito de la madre de la pequeña de 7 años, cuyo cuerpo fue localizado el domingo en calles de la alcaldía Tláhuac; el llanto anegaba su rostro, y con dificultad y visible dolor entró a la casa para velar a su hija.
Momentos después, Luis Hortensio agradeció a los medios de comunicación que realizaron la cobertura; informó que este martes a las 13:00 horas se realizará la misa y luego el sepelio.
A la menor de siete años, se la llevo -el 11 de febrero-, una mujer, de la escuela primaria Enrique C. Rébsamen, y cinco días después apareció su cuerpo en las inmediaciones de la alcaldía Tláhuac.
Cercanos a la menor hicieron fila para entrar de dos en dos a la casa y darle el último adiós.