El COVID 19 sigue existiendo

Por: María Elodia Zurita Argáez

¡Hoy también, es un gran día!

Seguimos en alerta por la pandemia provocada por el COVID-19. Tres meses han pasado y el virus no da tregua; lamentablemente la población ha padecido esta terrible enfermedad; los adultos mayores son los que más bajas han sufrido, tal como se había previsto, aunque algunas personas no tan mayores y hasta niños se han tenido que enfrentar en esta lucha por la vida, algunos lo han librado, sin embargo, tristemente otros han perdido esta cruel batalla. Las medidas de prevención son las mismas: lavado de manos, cubre-boca y hasta mascarilla; recuerda guardar la sana distancia y permanecer en casa.

Estos meses han servido para conocer mejor al virus y obtener datos útiles para poder enfrentarlo con mayor eficacia. Primero, se pensaba que el virus únicamente afectaba a los adultos; ya quedó demostrado que también los niños son susceptibles de sus efectos.

Segundo, se creía que los adultos al contraer el virus tenían muy altas probabilidades de no sobrevivir, sin embargo, ha quedado demostrado que la edad es un factor de riesgo, pero no es determinante, ya que existen otros aspectos como las enfermedades crónico-degenerativas, la atención inmediata, o la actitud ante la misma.

Ahora se sabe que el virus se trasmite a través de la saliva que se expele al hablar, al toser y estornudar, si se toca un objeto contaminado o se estrecha la mano de una persona enferma, y por esto el uso del cubrebocas se convirtió en un artículo de primera necesidad.

La atención temprana puede resultar vital, al primer síntoma, a la primera señal de que algo está mal, raro o fuera de la normalidad se debe buscar la atención médica, y claro después demos seguir las instrucciones de cuidado y medicamentos que el médico recete.

Se recomienda que la persona enferma beba mucho líquido y descanse. Se debe tener a la mano el número de teléfono del médico que lo atiende.

Por último, hay que tener claros los síntomas de alarma para buscar la atención de servicios médicos de inmediato, por ejemplo: presentar dificultad para respirar, dolor o presión persistente en el pecho, cierto grado de confusión, incapacidad de despertarse o permanecer despierto, una coloración azulada en los labios o el rostro. Debemos recordar que los organismos son diferentes y lo mejor es estar atentos al estado de nuestro paciente, debido a que los síntomas pueden variar de una persona a otra.

Es importante informar al solicitar la ayuda, que el paciente es víctima de COVID19. No se debe olvidar que en situaciones de emergencia el tiempo es vital.

(https://espanol.cdc.gov/coronavirus/2019-ncov/if-you-are-sick/care-for-someone.html)

La ciencia nutre la mente, la religión alimenta el espíritu, el arte enriquece el alma. Facebook: Mary Zurita. Correo: maryzurita2006@yahoo.com.mx