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En los años 1960, doña Martha Castro Castro, pionera del panucho de guisado en Tabasco, comenzó a trabajar en la cocina a raíz de una oportunidad para sacar adelante a sus hijos.
Fue fundadora del exitoso negocio Panuchos del Charco del Sapo, establecimiento que se ha ganado la preferencia de políticos, artistas, deportistas y ciudadanía en general.
Martha Castro falleció a los 80 años, sus hijos y nietos la recuerdan como una mujer valiente, constante, generosa y con mucho celo en la cocina.
Sus inicios fueron frente al cobertizo de personal de Pemex en lo que hoy es la Biblioteca José María Pino Suárez, llegó a hacer hasta mil panuchos y tacos para su venta diaria. Comenzó haciendo comidas para los trabajadores de Pemex y de la Sección 44, al quedarse viuda continuó con su labor en la cocina.
Tenía cinco hijos, pero el más chico sufrió un accidente y falleció a los cinco años, el suceso la marcó y la impulsó a seguir luchando por su familia.
Compró un pequeño terreno en la esquina de las calles Pinos y Ángel Mario Martínez, en la colonia Guayabal, en 1985. Con la ayuda de sus cuatro hijos salía todos los días en su triciclo con una olla de panuchos de guisados y una cubeta de horchata. Su éxito aumentó hasta que la gente empezó a esperarla afuera de su domicilio para comer ahí, ya no fue necesario salir a buscar clientes.
José Manuel Hernández Castro señala que su mamá tenía sazón, era innovadora, humilde, carismática y persistente.
Roberto, otro de sus hijos, era conocido como Sapo, y muchos de los clientes decían “vamos a comer a los panuchos del Sapo”, por lo que la familia decidió bautizar el negocio como El Charco del Sapo, que ahora es marca registrada.
Doña Martha nunca imaginó el legado que dejaría tras años de trabajo, su pequeño negocio se convirtió en uno de los establecimientos más populares de la ciudad y un favorito entre la gente.
Conforme el negocio ha crecido ha podido dar trabajo a más personas, es un ejército que desde las 3 de la mañana inicia un ritual para la preparación de los famosos panuchos, desde la elaboración de los guisos hasta la tortilla y salsas.
Sus hijos -José Stanley, Alejandro, José Manuel-, y su nieto, José Roberto, están ahora al frente y la gente reconoce que mantienen la calidad, haciendo así homenaje a la memoria de su madre
FAVORITO EN VILLAHERMOSA
Los panuchos del Charco del Sapo son reconocidos por los villahermosinos por su originalidad, pues llevan distintos guisados, arroz y repollo. Pueden acompañarse con salsa de cebolla morada o la roja, preparada con tomate y chiles.
Alrededor de 20 personas colaboran, entre cocineros, ayudantes, meseros, y encargados de la preparación
Desde la 7 de la mañana están preparados los panuchos y en ocasiones se forman largas filas para comprarlos, en el menú hay 12 guisados diferentes. Aunque también venden tacos, los panuchos siguen siendo su especialidad.
60 AÑOS DE TRADICIÓN
- Fue fundado por Martha Castro Castro
- Fue la pionera del famoso panucho con guisados
- Se puede seleccionar entre 12 guisados
- Está ubicado en la avenida Usumacinta, colonia Guayabal
- Facebook: Panuchería El charco del sapo
Su fundadora, Martha Castro Castro, falleció este 2020, tenía 80 años
José Stanley, Alejandro y José Manuel Hernández Castro, (hijos), y José Roberto Hernández Jiménez (nieto), son los encargados
FOTOS: JAIME ÁVALOS
