Familias de el Cedral, Torno Largo y Gaviotas en Centro, sacan sus pertenencias con la finalidad de ponerlas a salvo; llevan días entre el agua
FOTOS: Jaime Ávalos
Elementos adscritos a la 30 Zona Militar, recorrieron el sector Cedral y la ranchería Torno Largo, así como sus secciones, para rescatar a las familias afectadas por el aumento del río La Sierra, que mantiene bajo el agua a las comunidades.
Decenas de elementos desde temprana hora de ayer recorrieron las áreas anegadas y apoyaron a la población a evacuar sus viviendas y llevar sus pertenencias a zonas más altas como parte del Plan de auxilio DN-III-E.
En el ejido El Cedral, colindante con la ranchería Torno Largo, primera sección, se formó un enorme vado de hasta un metro y medio de altura con fuertes corrientes en algunas zonas, lo que dificultaba el paso. No obstante, en el afán de salvar algunas de sus pertenencias, los habitantes se aventuraban a cruzar este afluente formado sobre el camino que une a ambas comunidades.
Con el empleo de vehículos 4×4, el Ejército Mexicano apoyó a decenas de personas con la finalidad de que no pusieran en riesgo su vida.
“Estamos haciendo todo lo posible para apoyar a los ciudadanos, a mi cargo hay 30 elementos con equipo especializado, para ayudar a la población y hacer nuestra labor en esta emergencia”, dijo a Novedades de Tabasco el capitán Velázquez.
Asimismo, personal del Sistema Nacional de Protección Civil recorrió estas zonas así como la colonia Gaviotas, donde implementó un operativo de auxilio a la población.
Para ello, también utilizaron equipo de rescate y camionetas todo terreno para facilitar el acceso y no poner en riesgo la vida y las pertenencias de los habitantes.
ES TODO LO QUE TIENEN
En un recorrido realizado por este medio informativo en dichas zonas afectadas, se constató la movilización de los habitantes para rescatar sus pertenencias. Samuel Valencia, de 62 años de edad, salió de su vivienda sobre un cayuco, con esfuerzo, guiaba un viejo ropero hacia tierra seca.
Sus familiares están cerca –nos contó- pero prefiere no dejar sus muebles, sino vigilarlos, es lo único que tiene y no quiere que se los roben.
“La ayuda del gobierno es poca, aunque sí nos ha llegado, de todas maneras uno no quiere salirse por miedo a que nos roben nuestras pocas cosas que tenemos en la casa”, comentó.
Pidió despensas, medicamentos, agua potable, eso sería de gran ayuda para quienes se quedan en casa –dijo-. “Los que no podemos salir nos la estamos viendo difícil, ojalá ya deje de subir el agua”.
María Jiménez remó cinco kilómetros para poder sacar sus cosas a bordo de un cayuco. “Hace falta que nos ayuden, tenemos que sacar nuestras cosas, lo poco que nos queda, porque en las pasadas lluvias lo perdimos todo”, comentó.