Dispara pandemia la venta informal de alimentos

La falta de empleo ha orillado a la creación de más establecimientos callejeros que –de acuerdo con la Canaco- afectan al comercio establecido; por otro lado, tienen gran demanda, pues resultan económicos para la mayoría de las personas

Villahermosa

En el ambiente de Villahermosa no solo se respira el smog que generan más de 600 mil automotores; también se percibe la grasa y el humo provenientes de puestos improvisados donde abunda la oferta de comida barata por doquier, que se ha convertido en la dieta del tabasqueño, en la que predominan el maíz y la carne.

Pese a la extensión territorial de casi 62 mil metros cuadrados, resulta complicado encontrar en la ciudad una banqueta, en donde no haya un puesto que alimente por igual a jóvenes estudiantes, personas maduras, oficinistas y familias enteras.

El 17 de agosto del 2020, en Tabasco fue aprobada una ley para contrarrestar los efectos nocivos de la obesidad, polémica en su momento y con diversas reformas posteriores, pero poco eficaces en los hechos.

Según el decreto aprobado por el Congreso del Estado, algunos de sus propósitos eran retirar de las tienditas de escuelas primarias las marcas comerciales e incentivar a los padres de familia a cuidar más la salud de los pequeños.

“Estamos muy mal alimentados en Tabasco, estamos acostumbrados a comer este tipo de alimentos que tienen muchos carbohidratos, muchas azúcares, y eso ha desencadenado que seamos uno de los estados con mayor obesidad, con mayor cantidad de enfermedades crónico degenerativas”, explicó el diputado Rafael Elías Sánchez Cabrales, de Morena, uno de los que dio luz verde a la llamada ley anti obesidad.

Paralelamente, ese mismo año, la Secretaría de Salud lanzó una campaña contra la obesidad para incentivar el consumo de comida más saludable, pues más de la mitad de los 2 millones 450 mil habitantes con que cuenta la entidad, tienen problemas de sobrepeso; pero aun así no se reduce el consumo de comida callejera.

Para variar, solo durante el 2020, la Secretaría de Salud registró más de 5 mil casos de paratifoidea, una enfermedad que regularmente se adquiere por la ingesta de comida callejera.

Contra todos esos números, por lo general, estas pequeñas plazas de comida ambulante suelen aprovisionarse en los paraderos de autobuses o cerca de las plazas comerciales.

A decir del presidente de la Cámara Nacional de Comercio (Canaco), Manuel Antonio Miranda Hernández, todo esto es reflejo de que el comercio informal creció no solo en Villahermosa, sino en todo el estado durante la pandemia.

Admitió que el tipo de actividad que más se disparó fue el de la venta de comida y expuso que esta actividad afecta el comercio formal.

“Todos tenemos derecho a ganarnos la vida, pero creo que debe de ser dentro de la legalidad”, expresó.

Durante un recorrido que Novedades de Tabasco realizó por el primer cuadro de la ciudad, se pudo constatar que la mayor parte del universo de comida callejera se concentra en las calles Pedro Fuente, Madero, Constitución y Bastar Zozaya.

Diariamente, la gente inunda esos lugares durante las horas “pico” matutinas y vespertinas. Los ejemplos abundan, pero se repiten: tres tacos de longaniza por 20 pesos, aunque en otros puestos se abaratan hasta llegar al clásico 2 por 1, en los de pastor.

Los clientes de un local contiguo saborean sus tacos al pastor, bistec o suadero sin cuestionar la procedencia de la carne que se sirve en cantidades generosas dentro de la tortilla. Algunos niños comen junto con sus padres como si se tratase de una auténtica comida familiar sin mesa ni cubiertos de por medio.

Sin embargo, aunque la demanda parece alta, algunos vendedores se quejan de que la venta ya no es tan próspera como en el pasado.

Salomón, un taquero que tiene su centro de operaciones en la calle Mina, dice que las ventas están muy flojas, en tanto que el gas y el aceite han ido por las nubes.

Muchos de estos pequeños estanquillos, son micronegocios familiares. Por ejemplo, el padre de Salomón fue la primera generación de taqueros.

El gobierno municipal de Evaristo Hernández Cruz ha intentado sin éxito meter en cintura a la industria de la comida callejera. También se ha hecho un intento por censar a estos comercios para conocer su cantidad exacta, sin resultados favorables.

Para el empresario restaurantero Wenceslao González, en Villahermosa es prácticamente imposible comer en la casa familiar y volver al trabajo, sobre todo para quienes viven en zonas periféricas, alejadas de los centros laborales y comerciales. Sus ingresos, además, no son suficientes para comer en establecimientos formales de mayor infraestructura, como restaurantes o incluso fondas; en algunos casos, las percepciones llegan a ser tan bajas que es imposible destinar 40 o 50 pesos diarios para una sola comida, de un solo miembro de la familia.

Alza de más del 60%

El especialista fiscal y ex funcionario del Sistema de Administración Tributaria (SAT), Raúl López Deante, reveló que del 2020 a la fecha, el empleo informal en Tabasco repuntó de un 63 al 77 por ciento.

“Esto es porque se ha visto que en las épocas de crisis el mexicano busca la manera de sostenerse a través de pequeños negocios y muchos de esos negocios están de manera informal, es decir, que no pagan impuestos ni están dados de alta”, explicó.

Opinó que esto viene a colación, porque cuando se habla de la reforma fiscal, el gobierno siempre se va sobre el contribuyente cautivo, pero muy pocas veces se analiza la posibilidad de instrumentar una reforma para que el informal pase a formal.

A su juicio, la economía informal reduce la velocidad y crecimiento de la formal, porque nada más se mide el crecimiento económico sobre los que están cautivos y sobre cifras reales.

“Creemos que la economía informal es una válvula de escape para las familias mexicanas, porque si no hubiera economía informal, hubiera más pobreza extrema”, expresó.

Al cierre del cuarto trimestre de 2020, ocho entidades federativas del país aumentaron su nivel de informalidad en relación con igual periodo del 2019.

Tabasco, Chiapas, Veracruz, Hidalgo, Oaxaca, Sonora, Nayarit y Estado de México presentaron ascensos en el indicador de informalidad; de 60.96 a 65.06%.

NECESIDAD

  • 8 mil negocios de comida informal en Villahermosa
  • Ubicación: primer cuadro de la ciudad, colonias como Gaviotas, Centro.
  • Riesgos del consumo
  • Enfermedades gastrointestinales, tifoidea, paratifoidea.

Fuente: Canaco, especialistas, Salud.

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