Rusia ha alertado este miércoles de que «vigilará atentamente» las maniobras que tiene previsto hacer la OTAN en Ucrania y el mar Negro a finales de junio y principios de julio, en un momento en el que las tensiones con la Alianza, la Unión Europea (UE) y otros países de Occidente han alcanzado niveles sin precedentes.
«El Ministerio de Defensa de Rusia vigilará atentamente la preparación y realización de la maniobra ucraniano-estadunidense Sea Breeze, con participación de países de la OTAN, y en caso de necesidad reaccionará adecuadamente», declaró el portavoz de Defensa ruso, mayor general Ígor Konashénkov en un comunicado.
El representante militar ruso constató que Ucrania, Estados Unidos y varios países de la Alianza efectuarán esas maniobras navales conjuntas del 28 de junio al 10 de julio, «en medio de las incesantes acusaciones de Occidente sobre el supuesto incremento del potencial militar en el suroeste de Rusia».
En los ejercicios participarán militares de Ucrania, EU, Canadá, Gran Bretaña, Holanda, Rumanía, Bulgaria, Grecia, Turquía y Letonia, entre otros países.
En las maniobras Sea Breeze concurren alrededor de 4 mil soldados, 40 buques de guerra y otras embarcaciones, 30 aeronaves y más de 100 vehículos, incluidos tanques y otros blindados.
IMPLICACIONES EN LA GUERRA EN UCRANIA
«Quiero destacar de modo especial, que según la leyenda de las maniobras, la coalición practicará la solución de una crisis generada por ‘grupos armados ilegales apoyados por un estado vecino'», señaló Konashénkov.
Esto se refiere a las milicias prorrusas que actúan en el este de Ucrania en el contexto de la guerra que se libra en las regiones de Donbás y Lugansk desde 2014.
Para el portavoz de Defensa ruso, a pesar de que estos ejercicios, por su estatus y su denominación son calificados como navales, «sus verdaderas fronteras de acción militar van más allá de los límites de las aguas territoriales de Ucrania en el mar Negro».
El militar ruso señaló que gran parte de las maniobras se llevará a cabo sobre tierra, con uso de fuerzas de desembarco aéreo y paracaidistas, tanto de día como de noche, y señaló que «bajo la cobertura del ejercicio, se planea entregar armas modernas y municiones» al Ejército ucraniano.
En referencia a la guerra en el este de Ucrania, Konashénkov advirtió de que «como en años anteriores», este armamento pasará a manos de las Fuerzas Armadas de Ucrania y «grupos nacionalistas» ubicados en Donbás y Lugansk.