La directora mexicana Tatiana Huezo competirá con Noche de Fuego en Una Cierta Mirada del Festival de Cannes, sección oficial que este año centra su foco en el cine más joven y de autor.
Rodada en Neblinas, Landa de Matamoros, un pequeño poblado en la sierra Gorda de Querétaro, Noche de Fuego retrata la historia de amistad de tres niñas que viven en un lugar en el que es peligroso crecer siendo mujer. Las pequeñas tienen escondites bajo tierra para escapar de la amenaza de ser secuestradas y sus madres las entrenan para huir de la muerte y para escapar de aquellos que las convertirían en esclavas.
“El contexto es hostil y está enmarcado en el ámbito de la siembra de maíz y amapola en las montañas, que podría ser cualquier montaña de cualquier pueblo de nuestro país. Su narrativa, sin embargo, ofrece una mirada honesta frente a la violencia del mundo adulto”, comentó la realizadora de origen salvadoreño cuando presentó un adelanto en Los Cabos, en el 2019.
Noche de Fuego ha sido para Tatiana Huezo un viaje interior hacia su propia infancia y adolescencia, “intenté mirar desde los ojos de una niña, tengo una hija y eso me remonta a mirar atrás, viene de de algo muy personal… aunque es una película que también tiene su génesis en la adaptación del libro de Jennifer Clement”, dijo.
El delegado general del certamen, Thierry Frémaux, señaló este jueves en conferencia de prensa que en esa sección también estará presente la directora rumana Teodora Mihai con La Civil, filme coproducido por el cineasta mexicano Michel Franco.
Dieciocho películas, seis de ellas óperas primas, se proyectarán en Una Cierta Mirada, que en 2020, al igual que el certamen, no pudo celebrarse debido a la pandemia y que este año vuelve a la Croisette del 6 al 17 de julio.
Huezo, que tiene 49 años y doble nacionalidad, mexicana y salvadoreña, ganó reputación internacional con su primer documental, El lugar más pequeño, en 2011. Su segundo proyecto, Tempestad (2016), centrado en la violencia mexicana, se llevó el premio Fénix al mejor documental en los premios Goya.
Noche de fuego es su primera película de ficción y se enfrentará entre otras a Delo, de Alexey German Jr.; Blue Bayou, de Justin Chon; Bonne Mère, de Hafsia Herzi; o Valdimar Jóhansson con su ópera prima Lamb.
Una Cierta Mirada, según admitió Frémaux, ha sido considerada a menudo como la sección en la que acababan las películas que no habían encontrado su hueco en la competición oficial, pero el certamen le quiere devolver este año su “sentido original”, con la mirada puesta en esa cinematografía más joven.