Lo acompañaron presidenta del Sistema DIF Tabasco, María Guadalupe Castro de Merino, y los comandantes de la 30 Zona Militar y Quinta Zona Naval Militar
Con un llamado a todos los mexicanos para unirnos y con nuestro trabajo construir el futuro de México y Tabasco, que será el presente de nuestros hijos y nietos, el gobernador Carlos Manuel Merino Campos encabezó este lunes, la ceremonia del 174 Aniversario de la Gesta Heroica de los Niños Héroes de Chapultepec.
En presencia de los comandantes de la 30 Zona Militar, José Fausto Torres Sánchez, y de la Quinta Zona Naval Militar, Gabriel Pablo González Contreras, el mandatario presidió la ceremonia cívica para honrar a los seis cadetes, quienes en 1847 decidieron entregar sus vidas, antes que permitir el avance de las tropas extranjeras invasoras.
En compañía de su esposa y presidenta del Sistema DIF Tabasco, María Guadalupe Castro de Merino, el mandatario estatal escuchó el pase de lista de los seis Niños Héroes, depositó una ofrenda floral en el monumento erigido en honor de los soldados, montó una guardia de honor en su memoria, y refrendó su respeto por nuestros símbolos patrios.
El comandante del 37 Batallón de Infantería, Carlos Alonso Nava Levinstein, se encargó de ofrecer el discurso de las fuerzas armadas, con el que se recordó con respeto y orgullo infinito la epopeya heroica del Castillo de Chapultepec, a causa del artero asalto perpetrado por el general Winston Scott, en la intervención norteamericana en tierras nacionales.
Ante los presidentes del Tribunal Superior de Justicia (TSJ), Enrique Priego Oropeza, y la mesa directiva del Congreso del Estado, Emilio Contreras Martínez de Escobar, dijo que hace 174 años se gestó en nuestro país una injusta confrontación causada por intereses expansionistas, luego de cruentas batallas en el Norte de nuestro país.
Recordó que las fuerzas invasoras luego de atacar la heroica Veracruz y tomarla, se dirigieron a la Ciudad de México, y al mando de 12 mil hombres bien organizados, equipados y adiestrados, el general Scott avanzó incontenible, derrotando a su paso a las unidades nacionales en las batallas de Padierna y Churubusco.
Durante la ceremonia cívica a la que también asisteron los secretarios de Gobierno, Guillermo Arturo del Rivero León; de Educación, Egla Cornelio Landero; de Cultura, Ramiro Chávez Gochicoa así como otros funcionarios estatales y municipales, Nava Levinstein narró que solo quedaba el majestuoso Colegio Militar establecido en el Castillo de Chapultepec, en cuyo interior se encontraban los cadetes en espera de los refuerzos prometidos.
Ante José Marcos Quintero Duendia, quien asistió en representación del alcalde, Evaristo Hernández Cruz, dijo que aunque fueron invitados a abandonar el plantel, solicitaron a su director enfrentarse al enemigo para evitar se apoderara del colegio.
Fue así que al amanecer del 13 de septiembre, las fuerzas extranjeras abrieron fuego sobre el cerro del Chapulín, señaló, y fue entonces, cuando los valientes cadetes del Colegio Militar escribieron una de las páginas más gloriosas de las que puede ufanarse la historia nacional: luchar cuerpo a cuerpo contra los invasores.
“Vicente Suárez, Agustín Melgar, Francisco Márquez, Fernando Montes de Oca, Juan de la Barrera y Juan Escutia hicieron gala de bravura y verdadero estoicismo, y sin importarles su inferioridad, se aprestaron a la loable defensa del Castillo de Chapultepec, siendo arrollados por el adversario y en el impulso de la breve lucha, murieron los cadetes”, afirmó.
El comandante del 37 Batallón de Infantería de la 30 Zona Militar subrayó que hoy, ante la modernidad, debemos ubicarnos en el momento histórico que nos tocó vivir y aceptar que los lazos de unión y fraternidad se han ido refrendando día a día entre los países del mundo.
Aseveró que hoy por hoy, en nuestra actitud hacia el progreso, la superación y el mejoramiento de nuestro México como un todo, “debemos demostrar que seguimos siendo valerosos, que amamos a la tierra que nos vio nacer y que lucharemos ante todo por conservar el legado de nuestros próceres”.
“Vivamos con la frente en alto, la mirada orgullosa y empuñemos el cetro de la libertad, la independencia y la soberanía, esgrimiendo la espada del progreso, el honor y la paz, como un homenaje al ejemplo incomparable de nuestros Niños Héroes, que lucharon por su colegio, suelo y pueblo, y que decididos ofrendaron su vida por el honor de México”, resaltó Carlos Alonso Nava.