“El rock volverá”: Dave Evans

En 1953 nace el cantante galés Dave Evans, sin embargo, fue criado en North Queensland, Australia. A los 17 años se trasladó a Sídney, donde conoció a los hermanos Malcolm y Angus Young. En noviembre de 1973 este par de hermanos reclutó a Evans (voz), a Colin Burgess (bajo) y a Larry Van Kriedt (baterista) para formar la que hoy es una de las bandas australianas más emblemáticas hard rock: AC/DC.

En las vísperas del año nuevo, la banda ofreció su primer concierto en un club en los suburbios de Sídney llamado Chequers. La estabilidad de esta primera alineación era prácticamente inexistente, Van Kriedt y Burgess fueron los primeros despedidos de la banda, y su lugar es ocupado por Robert Bailey (bajo) y Peter Clack (batería).

Con la nueva alineación, pero aún lejos de ser la banda de hard rock con la que serían inmortalizados, se internan en los Albert Studios para grabar “Can I sit next to you girl”, el primer sencillo de AC/DC. En la banda, aún sin tener claro su futuro, comenzaron las desavenencias, especialmente entre Angus Yong y Evans, motivo por el cual el cantante decidió abandonar la banda y en su lugar entró Bon Scott, el legendario cantante quien falleció en 1980.

Tras su salida, Evans continuó con su carrera musical con Rabbit, banda australiana de glam rock formada en 1973, con la que grabó los discos Rabbit (1975) y Too much rock and roll (1976), pero en esta banda tampoco perduró su carrera, así que años después formó Dave Evans and Thunder Down Under, proyecto con el que en 2001 grabó A hell of night, un disco tributo a AC/DC.

“Me alegra saber que fui parte de la formación original de AC/DC, después de mi salida, seguí rockeando y sigo rockeando fuerte hasta este momento, soy una persona feliz que disfruta mucho su vida, agradezco vivir y poder seguir haciendo ruido, porque muchos de los que también fueron integrantes de AC/DC, hoy ya no están”, dijo Dave Evans en entrevista con Crónica Escenario.

Años después en 2006, Evans sorprendió con nuevo material titulado Sinner, segundo álbum solista en la carrera del artista, disco que le valdría una gira por Estados Unidos, Europa y Australia; después, en 2008, lanzó Judgement day y en 2017 sorprendió a sus fanáticos con Wild, material realizado en colaboración con la banda noruega Barbed Wire, a quienes conoció durante su visita a aquel país.

Con motivo del 45 aniversario de su fundación y continuando con el tributo a AC/DC, en 2019 creó Masters and Sinners, espectáculo con el que visitó México por tercera ocasión en compañía de Neil Turbin, ex vocalista del grupo de thrash metal, Anthrax.

“Viví en Texas durante 10 años y no tenía idea de lo popular que era en el país, la primera vez que vine la pasé fantástico… de haber sabido que en México era tan popular el rock, lo habría visitado mucho antes, por eso no quise perder esta oportunidad con este nuevo formato que además me parece muy emocionante, es como los autocinemas y eso le da un aire de nostalgia y recuerdos viejos, espero que la gente esté tan emocionada como yo”, contó.

Este año, tras vivir el confinamiento en Australia, el artista regresa a tierra azteca con la segunda edición de Masters and Sinners. En esta ocasión, lo acompañan Rex Caravello y Rick Deliz, integrantes de la banda de rock de los ochentas, Green Jelly y Joe Wyman, ex baterista de la banda alemana Scorpions.

“El año pasado le fue muy bien a Masters and Sinners y en este año todos quieren ser felices y olvidarse de lo que pasa, seguro lo recibirán con más entusiasmo. Será un gran espectáculo, habrá algunas de las mejores canciones de AC/DC, éxitos de Bon Scott, temas de rock clásico, una gran mezcla de los temas más importantes de Scorpions y también podrán escuchar canciones de mi discografía”, dijo.

Desde la Carpa Astros, recinto que cerró a causa de la pandemia, el evento se celebrará este viernes 4 de diciembre y será un híbrido que combinará la modalidad de los autoconciertos y los streamings, el costo de los accesos será de 600 pesos mexicanos para el sencillo, y de 1,000 pesos mexicanos el boleto VIP.

“No habrá muchas entradas, y solo se permitirán cuatro personas por vehículo, pero sé que en México les gusta abarrotar los autos con más de cuatro personas —ríe— hay muchísima gente en el país así que esperamos que nos acompañe la gran mayoría sin riesgo, por eso también se transmitirá de forma virtual, seguramente desde donde nos acompañen se divertirán con nosotros”, externó.

Con 67 años de edad, Evans reflexiona sobre la adaptación tecnológica que ha tenido que pasar para lograr mantenerse en la industria musical: “Creo que el cambio a la era tecnológica ha sido difícil para todo el mundo, sobre todo en los últimos ocho o nueve meses, la gente y los artistas están usando todas las herramientas que pueden para hacer notar su presencia y llegar a los fanáticos, en lo personal este año he tenido suerte porque he logrado sacar adelante nuevos temas, pero la adaptación y la nostalgia de lo que fue, siempre está presente”, externó.

Durante este año, además del evento y pese a la emergencia sanitaria, Evans, finalizó la edición del álbum Live, material concebido durante el Lightning & Thunder Tour Latin America 2019, gira que lo llevó a recorrer Argentina, Chile, Panamá, Colombia, Estados Unidos y por supuesto México, entre otros.

Finalmente, el artista opinó respecto al destino de la industria musical para el próximo año, en el que Evans planea regresar al estudio de grabación para dar vida a los temas que pudo trabajar durante este caótico 2020.

“Creo que muy pronto todo se va a resolver y haremos conciertos masivos de nuevo, confío en que la vacuna contra el virus saldrá muy pronto, trato de ser optimista pensando que pronto se abrirán todas las fronteras del mundo, estoy seguro ¡el rock volverá!”, expresó.