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Dicho instrumento se solicitó para ser previsorios ante la situación que vivimos por la pandemia y así hacer frente a los compromisos que tiene un gobierno responsable, afirma
Al cierre del sexenio, no caeremos en la irresponsabilidad de heredar a la próxima administración mayor deuda de largo plazo, aseveró el secretario de Finanzas, Said Arminio Mena Oropeza, al afirmar que la actual administración ha reducido en casi 600 millones el nivel de endeudamiento que recibió del régimen anterior.
Clarificó que el gobierno estatal “no ha hecho efectivo” el empréstito de 1 mil 500 millones aprobado por la anterior Legislatura, por lo que explicó que dicho instrumento se solicitó con el propósito de ser previsorios ante la situación que vive Tabasco por la pandemia y así hacer frente a los compromisos que tiene un gobierno responsable.
No obstante, enfatizó, tenemos hasta el 2022 para utilizar o no ese crédito.
Al responder a los cuestionamientos formulados por los diputados locales de las distintas fracciones parlamentarias en el marco de la glosa del Tercer Informe de Gobierno, el secretario de Finanzas Said Mena recibió reconocimientos por parlamentarios de oposición debido al manejo responsable de las finanzas “en condiciones muy difíciles, que se recrudecieron en el contexto de la pandemia de COVID”.
Insistió en que “hablar de finanzas sanas, también es hablar de la capacidad que tiene el estado para endeudarse; lo no sano, sería que no pudiese acceder a ese tipo de liquidez”, reviró durante su comparecencia desde la máxima tribuna popular.
Mena Oropeza recalcó la política responsable y ordenada aplicada en el ámbito de las finanzas estatales, al tiempo que ventiló que los compromisos de pago heredados por la administración anterior “gravitan hoy de manera importante” en las arcas públicas y a pesar de ello, acentuó, se han previsto recursos del presupuesto 2021 para hacerle frente.
Garantizó que el próximo año el sector salud mantendrá una atención prioritaria en materia de presupuesto al tiempo que mencionó que desde ahora el Gobierno de Tabasco está tomando previsiones presupuestales para atender un posible repunte o una cuarta ola de COVID.
‘Sin deudas con CFE’
El funcionario estatal reiteró que Tabasco cuenta con un gobierno responsable, lo que ha valido que sea uno de los dos estados del país que mayores recursos destina a la salud y la educación, pese a que es de las entidades que mayores participaciones recibe.
Para clarificar inquietudes de los legisladores, precisó que el 92.8% de los ingresos del estado corresponden a fuentes federales y sólo 7.2 % provienen de recaudación estatal.
Sin embargo, “el predominio de los ingresos federales es una característica compartida de todas las entidades federativas; es decir, esto no es condición única, sino un contexto nacional”, precisó.
Rechazó que el tema de los subejercicios represente un problema para Tabasco. Ante ello señaló que estos están focalizados en actividades de la obra pública, principalmente, pero porque la mayoría de los recursos que se ejercen son de origen federalizado y en ocasiones llegan de manera tardía.
El secretario de Finanzas subrayó que incluso, el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) tiene ubicado a Tabasco como uno de los estados con mayor índice de cumplimiento en el ejercicio del gasto, con un cálculo cercano al 97%, un índice por arriba de la media nacional.
En otros temas, aseguró que a la fecha no existe, por parte del Gobierno del Estado, adeudo alguno con la Comisión Federal Electricidad (CFE) que tenga relación con los compromisos que la propia entidad asumió con la empresa, vía convenios, en el afán de lograr tarifas más económicas para los usuarios domésticos tabasqueños.
También descartó la existencia de ‘bonos de fatiga’, y sentenció que en Tabasco los logros salariales de la clase trabajadora se respetan.
Negó que en la administración estatal haya funcionarios que ‘ganen’ más que el Presidente de la República, y adelantó que de cara al cierre de año, se está brindando asesoría a los gobiernos municipales para que puedan reorientar su gasto y hacer frente a los compromisos de pago que tienen con sus trabajadores. «Lo que no habrá es adelanto de participaciones, porque la ley no lo permite», concluyó.
