En México, a inicios del otoño o comienzo de octubre empieza la temporada de influenza estacional ya que los climas fríos incrementan las infecciones respiratorias. Este año no será la excepción y la temporada de este virus coincide con la actual pandemia por COVID-19 por lo que aquí te explicamos cuáles son los síntomas de la influenza, tratamiento, cómo se contagia y diferencias con el coronavirus.
La influenza es una enfermedad respiratoria contagiosa que afecta a la nariz, garganta y pulmones, y es causada por los virus de la influenza, los cuales se clasifican en tres tipos: A, B y C, de los cuales se derivan otros subtipos debido a su versatilidad y adaptabilidad.
La mayoría de los casos de influenza en México suelen presentarse en otoño e invierno, afectando hasta a los pulmones en los casos más graves; sin embargo, la mayoría de las personas se recuperan entre una y dos semanas.
¿Cuáles son los síntomas de la influenza?
Fiebre
Escalofríos
Dolor de cabeza
Dolor de cuerpo
Debilidad o “cuerpo cortado”
Malestar general
Tos
Escurrimiento nasal o nariz tapada
Irritación de ojos
Dolor de garganta
Cansancio extremo
En algunas personas puede haber vómito o diarrea
Los síntomas se llegan a presentar en dos días aproximadamente de que sucedió el contagio. Por otro lado, recordemos que los síntomas más frecuentes del COVID-19, según la Organización Mundial de la Salud, son:
Fiebre
Tos seca
Cansancio
Dolor de garganta
Diarrea
Conjuntivitis
Pérdida del sentido del olfato y gusto
En casos graves, dificultad para respirar o sensación de falta de aire y dolor en el pecho.
Los cuales se llegan a presentar cinco días o más, desde que se llevó a cabo la transmisión del COVID-19.
¿Cómo se contagia?
La influenza se contagia por contacto directo entre personas; el virus puede entrar por la boca, nariz u ojos a través de las secreciones nasales cuando una persona enferma tose, estornuda o si saluda de mano o beso. También puede transmitirse por objetos o superficies contaminadas.
Tratamiento para la influenza:
Existen medicamentos específicos para combatir la enfermedad, por lo que es necesario acudir al médico para que haga un diagnóstico y recete las medicinas correctas.
¿Cómo prevenirla?
Una de las mejores formas para prevenir este virus es vacunándose todos los años, además de lavarse frecuentemente las manos con agua y jabón, evitar el contacto directo con contagiados, toser o estornudar cubriéndose con un pañuelo o con el antebrazo, evitar corrientes de aire frío, reforzar las defensas y mantener una higiene adecuada en los entornos.