La comunidad centleca se encuentra en jaque gracias a la invasión del mar en las viviendas; el litoral tabasqueño está dejando sin hogar a alrededor de 300 familias; expertos aseguran que esta condición podría agravarse
Francisco Uribe /Joel Rubio
Centla, Tabasco
El Bosque, perteneciente a este municipio costero, es hogar de 300 familias pero también es una de las comunidades que más rápido se está hundiendo en México.
De no tomarse medidas, en aproximadamente una década este pequeño pedazo de tierra podría quedar completamente sumergido entre las aguas del Golfo de México.
El Bosque, yace sobre tierras pantanosas, acariciada por el mar del litoral tabasqueño que bordea. Así que no sorprende que los fuertes oleajes sean frecuentes; esta condición está empeorando, aseguran los expertos. Pero no se trata solo oleajes, el pasado fin de semana la comunidad perdió parte de sus costas por la marejada provocada por la entrada del frente frío 28; mismo que no únicamente erosionó la playa, sino que se llevó algunas viviendas de los pescadores.
Doña Viviana Velázquez Hernández, quien lleva viviendo más de 30 años en el lugar, es testigo de cómo el mar ha ido ganando terreno. “Fácilmente se han perdido más de 300 metros de costas”, dice la mujer.
Bárbara Cardoza, coincide que en los últimos 20 años el mar ha “devorado” más de 50 viviendas, motivo por el cual muchas familias optaron por mudarse y abandonar el lugar, otros más se acomodaron con familiares hasta en tanto ver qué pasa.
Actualmente unas 300 familias viven en el lugar, una mezcla curiosa de tabasqueños y veracruzanos, pues muchos de los habitantes vinieron de Alvarado, Veracruz, a asentarse en la zona.
Cambio climático, principal detonante
Investigadores que se encuentran estudiando este fenómeno afirman que la pérdida de playa se debe al cambio climático y a la inmensa reserva de la biosfera local, compuesta de manglares, que favorece este fenómeno.
“Yo fui testigo cómo iba subiendo el mar y el mar y el mar, comiendo y comiendo y hasta lograr penetrar las casas y derribarlas”, confiesa Estela Cruz Gaspar.
Los eventos climáticos, cada vez más extremos y seguidos, han dejado en el litoral un reguero de árboles derribados. Incluso los más poderosos, que hacían de contención a las olas, han sucumbido a su potencia y van dejando cada vez más al descubierto las casi 20 hectáreas.
“La pérdida de la playa conlleva a la reducción de hábitat de las especies marinas, cambio de los ecosistemas y el calentamiento del mar”, sostiene la investigadora de la Universidad Juárez Autónoma de Tabasco (UJAT), Lilia Gama Campillo.
Advierte que el estado pierde hasta seis metros de costas mar adentro anualmente en algunas zonas debido a la erosión costera que ha potenciado el efecto de la elevación del nivel del mar como consecuencia del cambio climático, provocando la salinización del territorio en determinadas regiones y, por ende, desequilibrios en los ecosistemas.
Abundó que Tabasco es una zona vulnerable cuyos impactos del cambio climático más importantes son inundaciones, variaciones en la línea de costa e incrementos de la temperatura; a lo que se suman los efectos del hundimiento de las cuencas bajas de los ríos Grijalva y Usumacinta por el proceso natural de sedimentación y la extracción de petróleo y agua.
Esperan pronta respuesta de autoridades
Francisco Uribe
Antonio Merlín, delegado municipal dijo que están esperando una respuesta por parte de las autoridades, para ver donde serán reubicados, ya que es imposible seguir viviendo en la zona.
“Estamos pidiendo una reubicación, pero las autoridades municipales dicen que esto tiene que ser con calma, porque eso cuesta dinero”.
Por su parte, la alcaldesa Lluvia Salas, externó que ya realizó una visita a la comunidad para verificar las condiciones en que se encuentran, incluso, se está analizando la posibilidad de mudarlos a otro lugar más seguro.
El contraste de la situación; El Bosque se encuentra situado casi en frente de las instalaciones del campo marino Litoral Tabasco, el activo más importante de Petróleos Mexicanos (Pemex) en las costas tabasqueñas.
Llevan despensas
Ante la mirada atónita de los pobladores, una lujosa camioneta arribó con 50 paquetes de despensas como ayuda social a las familias damnificadas.
Dorkas Márquez, una joven señora de inmediato puso manos a la obra; comenzó a repartir los víveres a las mujeres y hombres que se acercaban.
“Esto no es de ninguna autoridad ni de partidos políticos, es una labor muy particular que decidimos hacer nosotros para aliviar la situación de las familias que padecen por la pérdida de sus viviendas”, externó a entrevistada.
Un reflejo de su efecto
Comunidad: El Bosque
Ubicación: junto a las orillas del Golfo de México, en Centla
Familias: 300
Pérdida de costas en 2 décadas: 300 metros
Situación actual
Los fuertes oleajes provocados por el frente Frio número 28, derrumbaron viviendas
Solución: familias piden ser reubicadas.
Fuentes: pobladores, UJAT
Testimonios
“Fácilmente el mar ha ganado como 300 metros en los últimos 20 años, la situación ya es preocupante”
Viviana Velázquez Hernández
“Estamos esperando una reubicación ya que esto es la solución a corto plazo, porque no hay forma de detener el avance del mar”
Antonio Merlín, delegado municipal
“Estamos pidiendo una reubicación, pero las autoridades municipales dicen que esto tiene que ser con calma, porque eso cuesta dinero”.
Incluso los árboles más poderosos, que hacían de contención a las olas, han sucumbido a su potencia y van dejando cada vez más al descubierto las casi 20 hectáreas
Los bordos de la carretera también se han reblandecido ante la erosión debido a la salinidad del agua
Casas perfectamente habilitadas para vivir ser han visto arrastradas por la condición del suelo en la que fueron edificadas