La Cuaresma dura 40 días; comienza el miércoles de Ceniza y termina antes de la Misa de la Cena del Señor del Jueves Santo. A lo largo de este tiempo que comprende del 2 de Marzo al 14 de abril del 200, sobre todo en la liturgia del domingo, hacemos un esfuerzo por recuperar el ritmo y estilo de verdaderos creyentes que debemos vivir como hijos de Dios.
El color litúrgico de este tiempo es el morado que significa luto y penitencia. Es un tiempo de reflexión, de penitencia, de conversión espiritual; tiempo de preparación al misterio pascual.
En la Cuaresma, Cristo nos invita a cambiar de vida. La Iglesia nos invita a vivir la Cuaresma como un camino hacia Jesucristo, escuchando la Palabra de Dios, orando, compartiendo con el prójimo y haciendo obras buenas. Nos invita a vivir una serie de actitudes cristianas que nos ayudan a parecernos más a Jesucristo, ya que por acción de nuestro pecado, nos alejamos más de Dios.
Por ello, la Cuaresma es el tiempo del perdón y de la reconciliación fraterna. Cada día, durante toda la vida, hemos de arrojar de nuestros corazones el odio, el rencor, la envidia, los celos que se oponen a nuestro amor a Dios y a los hermanos. En Cuaresma, aprendemos a conocer y apreciar la Cruz de Jesús. Con esto aprendemos también a tomar nuestra cruz con alegría para alcanzar la gloria de la resurrección.
40 días
La duración de la Cuaresma está basada en el símbolo del número cuarenta en la Biblia. En ésta, se habla de los cuarenta días del diluvio, de los cuarenta años de la marcha del pueblo judío por el desierto, de los cuarenta días de Moisés y de Elías en la montaña, de los cuarenta días que pasó Jesús en el desierto antes de comenzar su vida pública, de los 400 años que duró la estancia de los judíos en Egipto.
En la Biblia, el número cuatro simboliza el universo material, seguido de ceros significa el tiempo de nuestra vida en la tierra, seguido de pruebas y dificultades.
La práctica de la Cuaresma data desde el siglo IV, cuando se da la tendencia a constituirla en tiempo de penitencia y de renovación para toda la Iglesia, con la práctica del ayuno y de la abstinencia. Conservada con bastante vigor, al menos en un principio, en las iglesias de oriente, la práctica penitencial de la Cuaresma ha sido cada vez más aligerada en occidente, pero debe observarse un espíritu penitencial y de conversión.
Cómo vivirla
Durante este tiempo especial de purificación, contamos con una serie de medios concretos que la Iglesia nos propone y que nos ayudan a vivir la dinámica cuaresmal.
1. Arrepintiéndome de mis pecados y confesándome.
Pensar en qué he ofendido a Dios, Nuestro Señor, si me duele haberlo ofendido, si realmente estoy arrepentido. Éste es un muy buen momento del año para llevar a cabo una confesión preparada y de corazón. Revisa los mandamientos de Dios y de la Iglesia para poder hacer una buena confesión. Ayúdate de un libro para estructurar tu confesión. Busca el tiempo para llevarla a cabo.
2. Luchando por cambiar
Analiza tu conducta para conocer en qué estás fallando. Hazte propósitos para cumplir día con día y revisa en la noche si lo lograste. Recuerda no ponerte demasiados porque te va a ser muy difícil cumplirlos todos. Hay que subir las escaleras de un escalón en un escalón, no se puede subir toda de un brinco. Conoce cuál es tu defecto dominante y haz un plan para luchar contra éste. Tu plan debe ser realista, práctico y concreto para poderlo cumplir.
3. Haciendo sacrificios
La palabra sacrificio viene del latín sacrum-facere, que significa «hacer sagrado». Entonces, hacer un sacrificio es hacer una cosa sagrada, es decir, ofrecerla a Dios por amor. Hacer sacrificio es ofrecer a Dios, porque lo amas, cosas que te cuestan trabajo. Por ejemplo, ser amable con el vecino que no te simpatiza o ayudar a otro en su trabajo. A cada uno de nosotros hay algo que nos cuesta trabajo hacer en la vida de todos los días. Si esto se lo ofrecemos a Dios por amor, estamos haciendo sacrificio.
4. Haciendo oración
Aprovecha estos días para orar, para platicar con Dios, para decirle que lo quieres y que quieres estar con Él. Te puedes ayudar de un buen libro de meditación para Cuaresma. Puedes leer en la Biblia pasajes relacionados con la Cuaresma.
Miércoles de ceniza
El próximo 2 de marzo se llevará a cabo el Miércoles de Ceniza donde los creyentes acudirán a recibir la cruz de ceniza en la frente, un símbolo que conmemora el periodo de la época de cuaresma y una tradición con orígenes judíos donde la ceniza era un símbolo que representaba la fugacidad de la vida y el arrepentimiento de los pecados. Durante esta fecha los judíos se cubrían el cuerpo con ceniza como una forma demostrar que intentaban acercarse a Dios. Con el paso de tiempo, la costumbre fue adoptada pero de un forma distinta a la actual. En la tradición católica, cada miércoles los creyentes acuden a la iglesia para que el sacerdote les coloque una cruz de ceniza en la frente, como símbolo al verso del Génesis 3:19 el cual dice: “Fuiste hecho de polvo y al polvo volverás”. La ceniza representa un signo de humildad y le recuerda al cristiano su origen y su fin, y que la vida terrenal es temporal.
Las cenizas son obtenidas de las palmas o ramos del Domingo de Ramos de un año atrás, el proceso consiste en quemar los ramos hasta obtener un polvo fino, el cual es utilizado en varias partes del mundo, incluyendo a México. En los Estados Unidos, las cenizas son mezcladas con agua bendita o aceite de crisma para crear una pasta.
Mensaje del papa Francisco
El Vaticano publicó el Mensaje del Papa Francisco para la Cuaresma 2022 con el tema: “No nos cansemos de hacer el bien, porque, si no desfallecemos, cosecharemos los frutos a su debido tiempo. Por tanto, mientras tenemos la oportunidad, hagamos el bien a todos”.
En su mensaje, el Santo Padre recuerda que la Cuaresma es “un tiempo favorable para la renovación personal y comunitaria que nos conduce hacia la Pascua de Jesucristo muerto y resucitado” y animó a reflexionar sobre el tema del Mensaje que se basa en una exhortación de San Pablo a los Gálatas.
Calendario 2022
Miércoles de ceniza: 2 de marzo
Domingos de cuaresma: 6 de marzo, 13 de marzo, 20 de marzo, 27 de marzo y 3 de abril.
Domingo de ramos: 10 de Abril
Jueves Santo: 14 de Abril
Viernes Santo: 15 de Abril
Sábado Santo: 16 de Abril
Domingo de resurrección 17 de abril