The Killers conquista México

Caía la noche en la Ciudad de México, el sol en el horizonte pintaba de rojo la mitad del cielo, mientras que la otra mitad estaba nublada, amenazando con lluvia, pero eso no detenía a los fanáticos que poco a poco se daban cita en el imponente Foro Sol.

El sonido de las máquinas checando los boletos, el sonido de las latas de cerveza al abrirse y la emoción del público se mezclaban en un ambiente sumamente lindo.

Mientras algunos asistentes encontraban su lugar, otros ya estaban acomodados; la parte general, cómo era de esperarse, estaba completamente llena y la gente gritaba ante cualquier sonido de guitarra o a las pruebas de luces, la euforia contenida quería explotar para recibir a The Killers.

Pasando las 9 de la noche del pasado viernes las luces se oscurecieron, y una sola luz en el escenario se encendió, la “k” tan característica de la banda estaba en el centro mientras Brandon Flowers y compañía entraban al escenario entre la euforia del público que tanto había esperado este reencuentro.

Pero los asistentes no eran los únicos eufóricos, pues la agrupación estadounidense no empezó con medias tintas, pues desde la primera nota de “My own soul’s warning” (canción con la que inició el show) se notó que estaba impresa toda la energía acumulada.

Un inicio vibrante acompañado de pirotecnia y varios papelitos que poco a poco caían fue controlada por el tema “Enterlude”, pero esto solo el preámbulo para que el público estallara en la siguiente canción que fue “When you were young”.

“Damas y caballeros, chilangos, estamos vivos” fueron las palabras de Brandon Flowers, hablando un estupendo español para deleitar a sus fanáticos y poder continuar con “In the car outside”.

Después llegó el turno de “Smile like you mean it” junto a “Shot at the night”, temas que llenaron de nostalgia y romanticismo el recinto y con las cuales el público se encargó de cantar al unísono, haciendo vibrar aún más las emociones que se sentían en el aire.

La adrenalina y energía volvió a explotar con un tema de su primer disco Hot fuss, pues “Somebody told me” hizo brincar y cantar a todos los asistentes que se maravillaban por la voz de brandon, por los magníficos visuales en el escenario y por el gran show de luces que acompañaban cada tema.

Al terminar la canción toda la agrupación se dio la misión de buscar a una persona del público para darle la oportunidad de poder tocar con ellos, el afortunado fue un joven de nombre Roberto, quien tembloroso tomó las baquetas y de manera excepcional interpretó “For reasons unknown”.

En una parte del tema Brandon Flowers volteo para preguntar al joven baterista “¿todo bien?”, para después seguir cantando y jugando con el público.

Todos los asistentes coreaban y apoyaban al joven que al terminar la canción se tomó una selfie con el vocalista, quien continuó con “A Dustland fairytale”, en donde le pidió al público que le prestara la luz de su celular y poder convertir todo el Foro Sol en un show de luces increíblemente mágico.

El público estaba encantado, maravillado con el setlist al cual se le seguían sumando grandes éxitos de sus discos anteriores, como era el caso de “Spaceman”, “Shadowplay” y “Just another girl”, las cuales fueron coreadas de gran forma.

“Runaway” continuó la euforia, y de una manera magistral y sin detenerse la agrupación hizo una transición hacia el siguiente tema, el cual provocó un grito ensordecedor en el público, pues una de las consentidas de los fans, como lo es “Read my mind” estaba comenzando.

“All these things that I’ve done” y “Caution” fueron las encargadas de cerrar el concierto, pero como ya es una costumbre ante los gritos y chiflidos del público la banda regresó para hacer una pregunta con una voz robótica “are we humans?”.

La euforia se desató completamente, pues Human comenzaba a sonar para después darle paso a “Mr. Brightside” para cerrar así una noche maravillosa, siendo Ronnie Vannucci Jr, baterista de la banda, el último en bajar del escenario, pues se quedó para obsequiar sus baquetas y agradecer al público la gran noche que les hicieron vivir.