Cada 26 de junio se conmemora el Día Internacional de la lucha contra el uso indebido y el tráfico ilícito de drogas, una fecha para tratar de reforzar la acción y la cooperación entre los países con el fin de alcanzar una sociedad libre de consumo de drogas y de tráfico ilegal.
Redacción
Villahermosa
El consumo y la distribución de drogas ilegales es una problemática global, con graves repercusiones en la salud y bienestar de las personas. A nivel mundial la incursión de drogas ilegales ha logrado traspasar fronteras con niveles alarmantes, afectando la seguridad y el desarrollo sostenible de las naciones. La lucha contra este flagelo persiste, contando con el apoyo de Organizaciones, Fundaciones y Estados Miembros. En virtud de ello la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) aprobó en el año 1987 una resolución para conmemorar este día, para alcanzar una sociedad libre del abuso y tráfico ilícito de drogas, propiciar el fortalecimiento de la cooperación internacional y generar políticas que contrarresten la influencia del mercado ilegal de sustancias ilícitas.
La historia
Desde principios del siglo XX se reconoció el tráfico de drogas como un problema a nivel mundial que requería una solución global. En 1909 hubo una conferencia internacional sobre estupefacientes en Shanghái. A partir de ese momento se desarrolló un sistema multilateral para tratar de controlar la producción, el tráfico y el abuso de drogas, y se llevaron a cabo tres tratados bajo el paraguas de la ONU, en los años 1961, 1971 y 1988, con una adherencia casi universal por parte de todos los países. Pese a los grandes esfuerzos realizados el problema de la droga sigue poniendo en peligro la salud de las personas, sobre todo los niños y los jóvenes. En 1946 el Consejo Económico y Social (ECOSOC) creó una Comisión de Estupefacientes (CND) para ayudar a supervisar la aplicación de los tratados internacionales.
En 2009 se publicó una «Declaración Política y Plan de Acción sobre Cooperación Internacional hacia una Estrategia Integral y Equilibrada contra el Problema Mundial de las Drogas», en el que se definieron las medidas a tomar y los objetivos a cumplir por los Estados Miembros para antes de 2019. En abril de 2016 la Asamblea General mantuvo un periodo extraordinario de sesiones dedicado a las drogas y propuso recomendaciones para reducir la oferta y la demanda, así como para mejorar el acceso a medicamentos controlados y restringir su desvío al mercado ilegal.
El tema de este año
Cada año, la campaña de la ONU se centra en un tema concreto. Para 2022 el tema es «Abordar los desafíos de las drogas en las crisis humanitarias y de salud». En muchas partes del mundo hay muchas personas vulnerables, sometidas a situaciones de guerras y crisis humanitarias, la pandemia y los problemas energéticos, climáticos y alimentarios. Se trata de proteger a los más vulnerables, incluidos los niños, niñas, jóvenes, personas que consumen drogas o que están en tratamiento de desintoxicación. Con la campaña #CuidadosEnTiemposDeCrisis, se pide a toda la sociedad a realizar acciones, invertir y lanzar recursos para proteger a las personas.
Problemas sociológicos derivados
La heroína, uno de los mayores problemas de salud pública de los últimos tiempos, viene de la familia de los opiáceos, que son utilizados desde hace más de 100 años en el campo de la medicina, como anestésicos y paliativos del dolor.
Al margen de los efectos negativos a nivel sociológico y sanitario que las drogas ilegales tienen sobre nuestra sociedad, existen numerosos daños colaterales, pues estamos hablando de uno de los negocios tristemente más lucrativos del planeta.
Un claro ejemplo de estos daños se ve en las estructuras económicas de los países productores en los que se cultiva opio (Afganistán) o cocaína (Colombia), pues resulta mucho mas lucrativo que la plantación de otros productos legales, llevando al empobrecimiento de los propios campesinos que la manufacturan y al enriquecimiento y la proliferación de las mafias, destruyendo el tejido socio-económico de las regiones.
Otro de los grandes efectos negativos de las drogas sobre la población civil en algunos lugares del mundo consiste en los intereses creados por estos, la financiación de armamento ilegal, el aumento de la delincuencia y el contrabando, cuestiones que han terminado con muchas familias y comunidades en múltiples lugares del mundo.
Finalmente ante este panorama, el Día Internacional de la Lucha contra el Uso Indebido y el Tráfico Ilícito de Drogas es una oportunidad que puede ser aprovechada para difundir un espíritu de solidaridad compartido para afrontar los nuevos retos. Una forma de encarar el problema de las adicciones es través de la información. Por ello, la campaña invita a todas las personas a adoptar una postura firme contra la desinformación y las fuentes que no son fiables, al mismo tiempo que nos comprometemos a compartir solo datos reales sobre las drogas que estén respaldados por la ciencia y, de esta manera, contribuir a salvar vidas.
Tipos de drogas
El consumo de drogas genera diferentes efectos en el sistema nervioso, alterando el rendimiento físico, la percepción, el estado anímico y la conducta, de acuerdo a esta clasificación:
Depresoras
Comprende aquellas sustancias que bloquean las funciones del cerebro, ocasionando desinhibición. Sensación de relajación, disminución de la ansiedad:
• Opiáceos (heroína, morfina, metadona, opio, codeína)
• Cannabis
• Benzodiacepinas
• Barbitúricos
Perturbadoras
Sustancias que alteran el funcionamiento del cerebro, generando distorsiones perceptivas, alucinaciones y otras alteraciones de la conducta:
• LSD
• Hongos alucinógenos (mescalina, peyote)
• Cannabis
Estimulantes
Sustancias que activan el funcionamiento del cerebro, mediante sensaciones de excitación y furia, que pueden derivar en problemas de hiperactivación, ataques de ansiedad, taquicardia, entre otros:
• Cocaína
• Anfetamina
• Nicotina
• MDMA (Éxtasis)
Cifras clave
275 millones de personas consumieron drogas en todo el mundo durante el último año
20 millones de personas consumieron cocaína en 2022, lo que corresponde al 0,4% de la población mundial
36 millones de personas sufrieron trastornos por consumo de estupefacientes
5,5% de la población de entre 15 y 64 años consumió drogas al menos una vez durante el año pasado
11 millones de personas se inyectan drogas, la mitad de las cuales viven con hepatitis C.