La Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) anunció este miércoles una subida de la tasa de interés oficial del 0.75 %, el sexto aumento consecutivo desde marzo y el cuarto consecutivo que aplica un cuarto de punto, en un nuevo intento de controlar la inflación, que sigue por encima del 8%, niveles de hace cuatro décadas.
El banco central estadounidense cumplió con las expectativas de los economistas y la tasa oficial de la mayor economía del mundo pasa a situarse en una horquilla de entre el 3.75 % y el 4%, el nivel más alto desde enero de 2008.
Desde 1994, la Reserva no había subido nunca los tipos de golpe 75 puntos básicos (0.75 puntos porcentuales) y ahora lo ha hecho por cuarta vez consecutiva desde junio.
Abierta a subidas menos agresivas
En su comunicado, la Reserva “anticipa que los aumentos continuos del rango objetivo serán apropiados para lograr una orientación de la política monetaria lo suficientemente restrictiva como para que la inflación vuelva a ser del 2% con el tiempo”.
Pero añade que “para determinar el ritmo de los futuros aumentos del rango objetivo, el comité tendrá en cuenta el endurecimiento acumulado de la política monetaria, los retardos con los que la política monetaria afecta a la actividad económica y a la inflación, y la evolución económica y financiera”.
Esta última frase, que no estaba en el comunicado de septiembre, puede sonar a que está dispuesta a frenar ese ritmo de subidas, lo que ha hecho reaccionar al alza las bolsas.
El comité “continuará vigilando las implicaciones de la información entrante” para tomar sus decisiones y “estará preparado para ajustar la orientación de la política monetaria según proceda si surgen riesgos que puedan impedir la consecución de los objetivos”. Para ello tendrá en cuenta, entre otras, las condiciones del mercado laboral, las presiones de la inflación y las expectativas de inflación y la evolución financiera e internacional.
La próxima reunión de política monetaria se celebrará los días 13 y 14 de diciembre, justo después de conocerse el dato de inflación de noviembre (la semana próxima se publicará el dato de octubre). Hasta ahora, la inflación se ha enquistado más de lo previsto y apenas se da por aludida por las subidas de tasas.
Frenazo en la actividad
“La principal motivación para subir los tipos de forma tan agresiva siguen siendo los datos de inflación aún elevados, con una tasa subyacente que ha avanzado más en septiembre hasta el 6.6%, un sólido informe sobre el PIB correspondiente al tercer trimestre de 2022, y las bajas tasas de desempleo y las elevadas ofertas de trabajo que señalan que el mercado laboral sigue sobrecalentado”, indica David Kohl, economista jefe de la entidad Julius Baer, a través de una nota.