Los contagios de COVID-19 en esta sexta ola se incrementan de forma lenta en México en las últimas cinco semanas, en comparación con la velocidad que se registró en la cuarta o quinta ola, informó el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López Gatell-Ramírez.
En El Pulso de la Salud, durante la conferencia de prensa matutina que encabezó el presidente Andrés Manuel López Obrador, y ante el secretario de Salud, Jorge Alcocer Varela, el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud explicó que el incremento de contagios es similar a lo que sucede en otras partes del mundo en temporada invernal, cuando aumentan las infecciones respiratorias.
Explicó que la comunidad científica internacional prevé que progresivamente COVID-19 entre en fase estacional, es decir, sin oleadas de contagios en primavera y verano, y que sea uno más de los 360 virus respiratorios identificados que afectan a las personas.
Reportó que la curva de defunciones muestra que la segunda ola fue la más letal. A partir de la tercera empezó a disminuir y ahora, en la sexta “la mortalidad es francamente baja, afortunadamente”, resultado de la extensa vacunación en todo el territorio.
Asimismo, añadió, es previsible que en las próximas semanas aumente la hospitalización por COVID-19, pero no con la gravedad y mortalidad que se registró en las primeras olas. Actualmente, la ocupación de camas generales se ubica en cuatro por ciento y con ventilador en dos por ciento.
Hasta esta fecha, 84 por ciento de todos los grupos de población elegible cuenta con al menos una dosis, así como 91 por ciento de mayores de 18 años, 64 por ciento de adolescentes y 60 por ciento de niñas y niños de 5 a 11 años.
Sobre la vacunación contra la influenza, López Gatell Ramírez dijo que se han aplicado 24 millones de dosis, lo que representa la cobertura de 62 por ciento, y a finales de diciembre alcanzará 70 por ciento. “De modo que vamos a buen ritmo para lo que está programado. Invitamos a la población a vacunarse de influenza, teniendo muy claro que no es una vacuna de uso generalizado”, puntualizó.
La vacuna contra la influenza se aplica a personas mayores de 60 años, niñas y niños de seis a 59 meses, mujeres embarazadas, personas con enfermedades crónicas o que padecen inmunosupresión.
Detalló que en caso de contagio con SARS-CoV-2, influenza o algún otro virus respiratorio, las personas deben mantener el resguardo en casa, practicar estornudo de etiqueta con el ángulo interno del codo, lavarse las manos frecuentemente con agua y jabón o utilizar alcohol-gel, limpiar las superficies de trabajo u hogar y usar de forma correcta el cubrebocas, principalmente en espacios cerrados y aglomerados.
Precisó que las medidas de salud pública como el cubrebocas y las vacunas no son obligatorias, sino por convencimiento de la población al conocer su utilidad. “Definitivamente no vamos a poner ninguna medida de carácter obligatorio, porque existe una probada experiencia científica de que las medidas que se imponen no son útiles, no son efectivas”, precisó.
En cuanto a los casos de meningitis en el estado de Durango, el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud informó que hasta esta fecha 71 personas desarrollaron infección viral, la mayoría mujeres, y se da seguimiento para detectar a tiempo cualquier síntoma a mil 800 personas que pudiesen estar en riesgo por haberse sometido a procedimientos anestésicos.
Las investigaciones continúan, explicó, en coordinación con el gobierno del estado de Durango a través de un comando operativo federal y estatal. La sospecha recae sobre los procedimientos de anestesia que se utilizaron en los cuatro hospitales privados que ya fueron clausurados.
Aclaró que la enfermedad no se transmite de persona a persona y en el caso de Durango no es aséptica, sino solo meningitis, debido a que se conoce el agente infeccioso, que es el hongo Fusarium solani.
Asimismo, dio a conocer que cada día la Secretaría de Salud federal, a través de la Dirección General de Epidemiología, emite el Comunicado técnico sobre la situación de meningitis en la entidad federativa de Durango, disponible en http://bit.ly/3j2iTVn.
El director general del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Zoé Robledo Aburto, informó los avances generales del Plan de Salud IMSS-Bienestar en siete entidades federativas, con acciones de equipamiento, infraestructura, abastecimiento de insumos, medicamentos y material de curación, y contratación de personal, en beneficio de la población sin seguridad social.
Señaló que en Nayarit IMSS-Bienestar permitió alcanzar un abasto de medicamentos de 99 por ciento. Cubre 13 hospitales, cuatro Unidades de Especialidades Médicas (Uneme) y 292 unidades de salud; se cuenta con mil 079 especialistas y mil 542 profesionales de enfermería, que equivale a 97 y 98 por ciento de cobertura, respectivamente.
Mientras que en Tlaxcala el abasto está en 96 por ciento en recetas surtidas y la inversión del programa es de 520 millones de pesos, de los cuales se ha ejercido 92 por ciento. Está presente en 10 hospitales, una Uneme y 181 unidades de salud; cuenta con mil 154 especialistas y médicas y médicos generales, y mil 350 profesionales de enfermería, lo que representa 91 y 92 por ciento de cobertura, respectivamente.
Zoé Robledo explicó que, en Colima, IMSS-Bienestar cubre cinco hospitales, una Uneme y 118 unidades de salud. Se cuenta con 641 especialistas y médicas y médicos generales, así como 919 profesionales de enfermería, lo que representa 82 y 88 por ciento de cobertura para el primero y segundo caso; asimismo, alcanza 97 por ciento de abasto en recetas surtidas.
En Baja California Sur, se tiene presencia en seis hospitales, tres Uneme y 58 unidades de salud; el surtimiento de recetas es de 99 por ciento y la cobertura con especialistas llega a 76 por ciento, y con profesionales de medicina general y de enfermería de 60 por ciento.
El director general del Seguro Social reportó que, en Sonora, IMSS-Bienestar ha permitido cubrir 98 por ciento de abasto de medicamentos; opera en 17 hospitales y 223 unidades de salud, con 68 por ciento de cobertura con especialistas, 50 por ciento con profesionales de medicina general y de enfermería.
En tanto, en Sinaloa abarca 23 hospitales, seis Uneme y 340 unidades de salud de primer nivel. Se cuenta con 53 por ciento de las y los especialistas que se requieren y 43 por ciento de médicas y médicos generales y de enfermería. Asimismo, el abasto de medicamentos llega a 96 por ciento.
Respecto a Campeche, informó que IMSS-Bienestar está en marcha en 11 hospitales y 133 unidades de primer nivel, con 50 por ciento de cobertura de especialistas y 53 por ciento de médicas y médicos generales, así como de enfermería.