La violencia de género es una realidad que transgrede los derechos las mujeres en el estado, sentenció la directora general del Instituto Estatal de las Mujeres (IEM), Nelly del Carmen Vargas Pérez, durante el círculo de reflexión impartido este jueves por el organismo, en el marco de la cruzada por un Tabasco más igualitario y femenino.
Durante el ejercicio de sensibilización en torno a la temática de los “Derechos sexuales y reproductivos de las personas con discapacidad”, la funcionaria convocó a la sociedad a unificar esfuerzos en la lucha por la transformación hacia una sociedad sostenida por principios de igualdad y respeto.
La actividad estuvo a cargo de Uriel Collado Badal, Técnico de Campo de la Dirección de Fortalecimiento Municipal del organismo, quien habló sobre la importancia de instrumentar estrategias y adquirir compromisos para propiciar cambios de conductas machistas y lograr una transformación positiva en las relaciones que sostienen este tipo de segmentos vulnerables.
Afirmó que todas las personas con discapacidad tienen el derecho a manifestar su identidad sexual y de género, al igual que su orientación-preferencia, de manera libre, sin discriminación, sin violencia ni coerción y sin que ello signifique algún tipo de exclusión u obstáculo para el ejercicio de sus derechos sexuales.
Collado Badal insistió en la necesidad de garantizar el goce pleno de los derechos sexuales y reproductivos de quienes padecen alguna limitación física, mental, intelectual o sensorial, con el fin de promover acciones que fortalezcan su ejercicio.
En el círculo de reflexión transmitido a través de plataformas digitales, como Zoom y Facebook Live, el especialista del IEM explicó que este tipo de derechos están relacionado con la libertad que las personas tienen a ejercer su sexualidad.
‘Son derechos que se basan en el reconocimiento del derecho básico de todos los individuos a decidir libre y responsablemente el número de hijas e hijos, el espaciamiento de los nacimientos, y a disponer de la información y de los medios para acceder a ello, así como el derecho a alcanzar el nivel más elevado de salud sexual y reproductiva”, abundó.
En su ponencia, Uriel Collado informó que de acuerdo con la Encuesta Nacional de la Dinámica Demográfica 2014 (ENADID), en México viven 7.1 millones de personas con alguna discapacidad, en su mayoría mujeres que son discriminadas y excluidas de sus derechos.
Puntualizó que según estimaciones, en los países en desarrollo unos 214 millones de mujeres en edad fecunda desean detener la procreación, pero no recurren a ningún método anticonceptivo moderno.