Ser papá es uno de los regalos más grandes que la vida da a quienes tienen la dicha de poder escuchar esta mágica denominación, pero también conlleva responsabilidad, entrega y mucha dedicación.
Hay papás muy especiales, a pesar de que la vida no los prepara para ello, y menos para afrontar problemas, como por ejemplo, hacer también ‘el papel de mamá’.
Jorge Luis Pedrero Córdova formó un excelente matrimonio con Griselda Vega Santiago y juntos disfrutaron el nacimiento de sus hijos Anette y Jorge Gabriel, a quienes vieron crecer, educaron y guiaron en muchos momentos que hoy son un hermoso recuerdo de vida.
Desafortunadamente su gran amor se fue de este mundo a un plano espiritual hace algunos años y Jorge Luis tuvo que afrontar el hecho de crecer a sus dos hijos, quienes son su más grande orgullo, aunque esa no ha sido una tarea fácil a lo largo de este tiempo.
“Es bastante complicado dar una respuesta, porque como papá es muy difícil cumplir los dos papeles, la partida de su mamá nos dolió a todos, a mí porque era el amor de mi vida, con quien compartía todo, quien me apoyaba y daba ánimos y ellos perdieron a su mamá, su refugio, su consejera y amiga”, comparte Jorge Luis con Novedades de Tabasco. “No nacemos sabiendo ser papás y mucho menos mamá”, agrega.
“Día a día pongo todo mi esfuerzo para darles lo mejor y a pesar de que uno se equivoca, aprende y hace más fuerte la relación de padre e hijos, creo que estoy haciendo un gran trabajo con ellos, apoyando sus proyectos de vida, escuchándolos y aconsejándolos”.
Como su padre y su amigo, se dan su espacio para salir de viaje, desayunan en casa como se hacía cuando vivía mamá, ven películas y salen a pasear juntos para disfrutarse.
A veces es complicado
Pero no todo es color de rosa, pues también hay su parte complicada y así lo expresa: “Lo complicado de ser padre y madre de dos hijos jóvenes, es que a veces ellos no entienden que me preocupo si salen a fiestas o a pasear con amigos; esa parte sí es un poco difícil, porque siempre hay temor de que algo les vaya a pasar, he tratado siempre de aconsejarlos, pero ya lo decían mis papás, niños pequeños, problemas pequeños, hijos jóvenes, problemas y preocupaciones más grandes”.
Él solo le pide a Dios la oportunidad de verlos realizados en la vida; su festejo del Día del Padre se lo imagina especial, porque así ha sido siempre, ambos chicos lo han sorprendido en este día, desde que eran niños, por lo que está seguro que este año no será la excepción.
FRASE
“Día a día pongo todo mi esfuerzo para darles lo mejor y a pesar de que uno se equivoca, aprende y hace más fuerte la relación de padre e hijos, creo que estoy haciendo un gran trabajo con ellos, apoyando sus proyectos de vida, escuchándolos y aconsejándolos”
Jorge Luis Pedrero Córdova