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Tras las inundaciones de 2007, la Conagua edificó obras de protección, retirando las construcciones y reubicando a quienes en ellas vivían a fraccionamientos como 27 de Octubre y Gracias México.
Villahermosa
Después de que con las inundaciones de 2007 muchas familias fueran reubicadas de los márgenes de los ríos -entre ellos del Mezcalapa- a los fraccionamientos como Gracias México y 27 de Octubre, ahora en improvisadas casas elaboradas a base de láminas de zinc o tejas de cartón, más de 500 ‘paracaidistas’ volvieron a apropiarse de terrenos federales que forman parte de las márgenes del también llamado río Viejo a su paso frente a la ciudad de Villahermosa.
Estas invasiones se tienen identificadas en las zonas de Curahueso y Sabina, dos rancherías que se formaron y crecieron en los años 50, producto del proceso de expansión de la colonia Tamulté de las Barrancas, uno de los núcleos más pobladas de Centro.
De acuerdo a un recorrido que Novedades de Tabasco realizó por el lugar, se trata de una franja de más de 4 kilómetros que es protegida por un muro de contención que la Comisión Nacional del Agua (Conagua), construyó durante el gobierno de Andrés Granier Melo para proteger contra las inundaciones a toda esa zona.
Los ‘paracaidistas’ levantaron sus chozas entre el río y el bordo de contención, no midiendo el peligro que esto representa en tiempo de grandes precipitaciones pluviales.
En una de esas casas de lámina vive Ernestina, una mujer de 56 años de edad que llegó a la zona hace 20 años junto con su hijo y sus padres.
Antes posaba en una casa de un familiar en la colonia Casa Blanca, que se encuentra a menos de un kilómetro de ese asentamiento irregular.
Su casa la construyó a base de madera y láminas, pues eran los materiales más económicos que encontró, tiempo después su segundo esposo la ayudó a construir una barda de block con la que ahora se protege de los nortes y polvo que imperan en este lugar.
Reconoce que la franja donde vive es terreno federal, sin embargo, dice que no cree que pueda ser desalojada, porque la autoridad debe de entender que no tiene donde vivir, aunque en realidad su caso no es el único.
Ernestina sabe que en cualquier momento pueden desalojarlos, pero confía que su antigüedad en el lugar los ayude y espera que algún día el gobierno pueda ayudarla con un predio.
PROBLEMA REAL
El Programa Estatal de Ordenamiento Territorial y Desarrollo Urbano señala que en Tabasco existen 259 asentamientos con 80, 322 lotes en situación irregular, que representan un problema serio para los ayuntamientos.
El estudio revela que los asentamientos irregulares, sobre todo en zonas urbanas, siguen creciendo en los 17 municipios por la invasión, con el peligro de que se convierta en una presión social, porque en tiempo de lluvias estos se van al agua, y en consecuencia estallan las protestas.
En contra parte, el Instituto de Vivienda de Tabasco (Invitab), dio a conocer que en la entidad hay más de 500 viviendas abandonadas, es decir, nunca fueron ocupadas por sus propietarios, por considerarlas lejos de su centro de trabajo.
En cuanto a la invasión de precios federales, la Ley de Aguas Nacionales es muy clara en su capítulo 119, articulo 4: “se sancionará a aquellos que ocupen o aprovechen vasos, cauces, canales, zonas federales, zonas de protección y demás bienes”.
El legislador Emilio Contreras Martínez de Escobar, admite que con la nueva Ley de Ordenamiento Territorial, Desarrollo Urbano y Obras Públicas, todos los entes públicos están obligados a tener un atlas de riesgo para que nunca más se pueda edificar en un asentamiento sin tener los permisos.
“La nueva normativa no permite vacíos legales y está enfocada en no permitir que donde no existan condiciones para vivir haya asentamientos de personas”, dijo.
Al respecto el director del Organismo Cuenca Sureste de Conagua, Felipe Irineo Pérez, dijo que todos los asentamientos ubicados dentro de una distancia de 20 metros de los cuerpos de agua o ríos, son irregulares.
Indicó que la dependencia está facultada para interponer una denuncia penal, y en estos casos ya se ha hecho ante las autoridades, aunque de momento no se han reactivado.
CÓDIGO PENAL FEDERAL
La invasión de propiedad es un delito en el que se ocupa o utiliza un bien inmueble sin la autorización del propietario. En México, se estipula, dentro del artículo 395 del Código Penal Federal, un castigo de tres meses a cinco años de prisión y una multa de 50 a 500 pesos, a quienes realicen dicha acción.
LEY DE AGUAS NACIONALES
Artículo 119. «La Autoridad del Agua» sancionará conforme a lo previsto por esta Ley, las siguientes faltas:
IV: Ocupar o aprovechar vasos, cauces, canales, zonas federales, zonas de protección y demás bienes a que se refiere el Artículo 113 de esta Ley, sin el título de concesión.
INVASIÓN
Lugar: rancherías Cura Hueso y Sabina
Hecho: 500 familias viven en las márgenes del Viejo Mezcala
Extensión: 4 kilómetros de zona federal está ocupada
Problema: el río Viejo Mezcalapa sube su caudal con gran rapidez en tiempo de lluvias
Justificación: los invasores aluden que no tienen dónde vivir
Estructura: La Conagua instaló bordos de concreto y de acero para evitar el desbordamiento del caudal
Materiales: las viviendas de los invasores son en su mayoría de lámina, cartón y madera
Joel Rubio / NT
Muro. Diariamente deben saltar la barda de contención para entrar a sus viviendas.
Joel Rubio / NT
Problemática. Viviendas de precarios materiales se aprecian sobre las riveras del Viejo Mezcalapa.
